La Generalitat Valenciana ha aprobado la primera Actuación Territorial Estratégica (ATE), tras la publicación ayer en el BOP del acuerdo que da luz verde al proyecto del grupo La Española para La Canal en Alcoy. La resolución abre un doble frente, ya que por una parte permite que La Española concrete y presente los proyectos de reparcelación y ejecución y, por otro, abre la vía a que se puedan promover recursos judiciales, una iniciativa que ya baraja Salvem el Molinar. baraja Salvem el MolinarEl PP lanzó ayer las campanas al vuelo a través de Rafa Miró y Fernando Pastor, afirmando que «en nada» estarán las obras en marcha.

Este destacado proyecto económico para Alcoy, no obstante, seguirá tramitándose los próximos meses. La Española, según ha sabido este diario, tiene a punto los proyectos de reparcelación y urbanización, por lo que puede presentarlos de forma rápida; no obstante, el proceso no implica todavía al Ayuntamiento de Alcoy y no será automático: las licencias tiene que otorgarlas la Generalitat, en base a informes previos -incluido uno de la Confederación Hidrográfica del Júcar-, todo lo cual requerirá una exposición pública posterior de 30 días, con la posibilidad de presentar alegaciones. «Como en cualquier proyecto de urbanización», indicaron fuentes municipales.

El grupo La Española, de cualquier manera, puede presentar a corto plazo las peticiones para los permisos necesarios -para lo cual tiene un plazo máximo de 2 meses-, que supondrán una inversión de unos 80 millones de euros, que permitirán crear unos 750 empleos director, indirectos y e inducidos, en una primera fase, y hasta 2.000 en la segunda, según explicaron Miró y Pastor. El propio director general de Urbanismo, Juan Giner, detalló a los dirigentes del PP que «Alcoinnova se convierte en la primera ATE aprobada por la Generalitat, por delante de otras que se iniciaron incluso antes», en clara referencia a Valencia-Mestalla. «Hoy es un día importante para Alcoy», resaltó Miró.

El grupo industrial tiene el objetivo de concentrar todas sus empresas en esta zona, situada junto al Estepar y frente a la autovía, en una parcela que es de su propiedad y desde hace más de cinco años, como resalta el edicto. La intervención se extenderá a una superficie de 469.000 metros cuadrados y una edificabilidad bruta de 161.097, de los que 39.000 serán para usos terciarios y 121.854 para industrial. Las zonas verdes alcanzan los 94.906 metros y se ha previsto una superficie para aparcamientos de 7.135 más.

Vertido «Cero»

La cuestión más polémica en torno a este proyecto es, presumiblemente, la de los vertidos, por causa de la presencia del manantial del Molinar en el subsuelo. Por ello, la empresa ha presentado estudios y procedimientos técnicos garantizando el vertido «cero». A este respecto, el dictamen del Consell destaca que deberán plantearse sistemas de tratamiento de gestión de aguas residuales y pluviales «que aseguren el vertido cero así como el plan de emergencia frente a vertidos accidentales en el Barranc de la Batalla».

De cualquier forma, el hecho de que la palabra no la tenga todavía el Ayuntamiento aplaza una posible crisis de gobierno entre PSOE y EU, aunque ambos partidos deberán decidir antes de dos meses si se plantea un recurso por la vía judicial frente a la aprobación de la ATE.