Celler La Muntanya y, por extensión, su proyecto «Microviña», anda enfrascado en uno de sus retos más atractivos: recuperar la Casa Alonso de Muro, un edificio situado en la plaza del Palacio de la Señoría y todo un símbolo del esplendor vitivinícola de la comarca de El Comtat hasta la la segunda década del siglo XX, cuando comenzó el abandono de los viñedos.
El objetivo que se persigue con la recuperación de este majestuoso edificio es que se convierta en la sede de «Microviña», lo que dará un impulso muy fuerte a la difusión de sus valores. Es decir, que el ecosistema empresarial rural puede ser un elemento muy importante a nivel económico, social, cultural y medioambiental.
La casa pertenece a la familia Alonso, que la ha cedido a tal efecto. El inmueble es originario de principios del siglo XIX, aunque según la documentación que obra en poder de la familia, podría ser incluso anterior. La casa se convirtió en residencia de los Alonso, que construyeron las dependencias para poder hacer vino y aceite, unas infraestructuras que todavía se conservan. Además, disponían de una gran huerta.
La arqueóloga municipal de Muro, Elisa Doménech, explicaba que «la cultura vitivinícola en Muro y en la comarca era muy importante. De hecho, en la Casa Palacio, situada justo al lado de la Casa Alonso, hemos podido contabilizar 70 toneles de vino, de unas dimensiones mayores de las que conocemos actualmente. Se producía tal cantidad de vino que se podía abastecer a toda la comarca y a la ciudad de Alcoy, y los excentes se exportaban».
También en la Casa Alonso había 40 toneles y tinajas, así como una almazara que se conserva a la perfección. Estos elementos serán aprovechados en el proyecto que está llevando a cabo el Celler La Muntanya, que pretende reproducir en el inmueble los modelos productivos del vino y del aceite, habilitar salas de reuniones y congresos, aulas para impartir cursos universitarios e incluso un pequeño hotel. El director de la bodega, Juan Cascant, agradecía la cesión del edificio por parte de la familia Alonso, señalando que «puede convertirse en un nuevo impulso para continuar transmitiendo la filosofía y valores del proyecto».
Por parte de la familia, Francisco Alonso indicó que «hemos decidido realizar esta cesión gratuita por las dimensiones del proyecto, sobre todo en su vertiente social. Estoy convencido de que mis antepasados estarían orgullosos de ver el uso que se le va a dar a la casa».
