El Ayuntamiento de Alcoy asumirá los treinta trabajadores que tiene el complejo deportivo del matadero «Eduardo Latorre»Ayuntamiento de Alcoy treinta trabajadores complejo deportivo matadero, a la vez que se ratifica en sus funciones a la actual responsable Nuria Trenzano, una medida que tiene el objetivo prioritario de garantizar el mantenimiento de todos los servicios, según explicó ayer el concejal delegado Natxo Gómez. Además, se ha decidido trasladar el Centre d'Esports a este recinto, lo que facilitará la habilitación de las nuevas dependencias de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía.
La «bomba» saltó el lunes a media mañana, cuando el propio alcalde Antonio Francés anunciaba que el Ayuntamiento asumía la gestión del complejo del matadero, después de que la empresa adjudicataria acumulase una deuda de 206.000 euros desde 2006. De hecho, no había abonado ni una cuota del canon, desde que el anterior gobierno del PP de Jorge Sedano se la había adjudicado en solitario, el 27 de julio de 2006, por 25 años. La sociedad era un consorcio participado por la Federación de Deportes Adaptados.
Ante la persistencia de los impagos, el gobierno de Francés ha decidido asumir el servicio, incorporando a toda la plantilla, que «pasará a ser personal laboral». Esta medida incluye a Nuria Trenzado, que mantendrá la dirección e incorporará otras funciones específicas del área de deportes municipal. Esta medida se vincula al cambio de ubicación del Centre d'Esports, que pasará al complejo del matadero, «donde hay espacio suficiente y podrá tener una mejor ubicación, a la vez que cuadramos la operación con la Comisaría de la Policía Nacional».
En cuanto a la operación, de la que el portavoz del PP Fernando Pastor criticó duramente en el pleno la falta de información y la «dudosa» legalidad por falta de un expediente, ya el alcalde contestó que los departamentos municipales de Secretaría e Intervención se habían ocupado de la gestión. Además, Natxo Gómez hizo hincapié en que «por encima de todo, hemos querido evitar la incertidumbre: que se abriera un debate político y ciudadano que pudiera haber provocado la salida de socios o incluso campañas de incentivación de la competencia. Hemos buscado que no hubiera mal ambiente, porque esto podría propiciar las fugas y garantizar que va a continuar el mismo personal, la misma gestión y que el asociado tendrá más actividades y servicios, que es lo que vamos a buscar».
Hay que significar que en el pleno de julio de 2006, toda la oposición se mostró crítica con la elección de esta sociedad para la gestión del complejo, pero el PP impuso su mayoría absoluta y la otorgó sin la más mínima duda. Paco Blay, de Compromís, denunció «cosas extrañas» en los informes; Lluís Torró, de EU, pidió que se aplazara y Rebeca Soler, del PSOE, dijo que se primaban «las tarifas más caras».
