El alcalde de Alcoy, Antonio Francés, denunció ayer que la Generalitat Valenciana ha retirado más competencias urbanísticas al Ayuntamiento en torno al proyecto de La Española en La Canal. En concreto, afirmó que el consistorio tenía la atribución de valorar los informes definitivos que presente la empresa, que ahora pasan a la Conselleria de Economía. «Nos parece de muy poca vergüenza la actitud de la Generalitat en este tema», dijo, que ya está en los tribunales, por una supuesta vulneración de la competencia municipal.

Francés insistió en que el PSOE no ha efectuado cambio alguno en cuanto a su posición sobre el plan de La Española. «Siempre nos hemos basado en los informes técnicos, por lo que el Ayuntamiento no se puede negar, y en este caso no lo hará, a otorgar licencias y permisos si tienen los informes favorables. Este gobierno no cuestionará los informes de la Confederación Hidrográfica del Júcar, que es el órgano competente. A la vez, el Ayuntamiento defenderá la autonomía local hasta las últimas consecuencias», significó.

Mientras tanto, el PP, a través de su portavoz Fernando Pastor, criticó duramente al alcalde por su «cambio de postura» sobre este tema. «Está claro que quién decide en el gobierno es EU», manifestó. El PP, además, ofrece su apoyo al PSOE para consolidar y dar estabilidad al gobierno de Alcoy si EU lo abandona, siempre que se respalde incondicionalmemente el proyecto. «Esperemos que Francés se lo piense», indicó Pastor.

Los socialistas, por otro lado, han convocado para el próximo 27 de septiembre una jornada para explicar su posición en relación a este asunto, e informar respecto a la situación en la que se encuentra en estos momentos el expediente. Se trata de una decisión de la ejecutiva local, que ha insistido en que «mantendrá la defensa de la autonomía local y luchará por el legítimo derecho de los alcoyanos a decidir sobre su territorio hasta las últimas consecuencias».

El portavoz socialista, Jordi Martínez, al igual que el alcalde, destacó que la postura de su partido «no ha cambiado para nada», y se refirió a las amenazas de ruptura de gobierno por parte de EU como un intento de «generar titulares de prensa y crear alarma».