La Asociación de San Jorge, entidad que organiza las Fiestas de Moros y Cristianos de Alcoy, se encuentra en estos momentos en situación de bloqueo institucional, a causa de una de las mayores crisis de los tiempos recientes, suscitada por la división interna que registra y que se ha acentuado tras las recientes elecciones.

La situación ha llegado a tal punto que podría acabar incluso provocando dimisiones a muy corto plazo, según ha podido constatar este diario. La mecha se encendió con el debate interno generado en la directiva en la elección de ponentes de la junta: el martes anterior, como adelantó este diario, se aprobó una distribución que el pasado viernes se revocó. Este martes, se reunió la directiva, pero el presidente Rafael Tortosa suspendió la sesión ordinaria y advirtió que convocaría una asamblea extraordinaria para decidir sobre los ponentes, según las informaciones recabadas.

Mientras la decisión de Tortosa fue catalogada como «ilegal» por miembros de la propia junta, los primers trons decidían celebrar una reunión con el fin de analizar la situación y estudiar posibles medidas. Entre llamamientos a la calma, 23 primers trons -el total son 28- decidían redactar un comunicado que a las siete de la tarde de ayer se entregaba en la Asociación de San Jorge y en el que se solicitaba la convocatoria de una asamblea extraordinaria tanto para debatir la situación como para contemplar incluso una posible reforma de estatutos.

En un comunicado muy breve, estos primers trons planteaban de forma específica la convocatoria de una asamblea extraordinaria de la institución, antes del mes de agosto. A la hora de justificar los motivos que han conducido a esta iniciativa, se esgrime la búsqueda «del consenso y la paz en la Asociación de San Jorge», como tema básico, pero no se descartan otros objetivos como el referido cambio de estatutos.

El equipo del presidente Rafael Tortosa contaba con mayoría en la junta y en la asamblea, pero esta situación ha cambiado -de manera notoria, al menos en el primer caso- tras el último proceso electoral. La directiva votó una distribución de ponencias -competencias en el seno de la institución-, que luego fue revocada por una mayoría de directivos, que sustituyeron a los inicialmente nombrados para Fiestas y Sillas.

De momento, la situación sigue estancada a la espera, posiblemente, de la asamblea.