Alcoy vivió anoche uno de los momentos más emotivos de la Semana Santa con el encuentro de la Dolorosa y el Nazareno en el Cantó Pinyó. La procesión de despedida se inició desde dos puntos. Las costaleras de la Cofradía del Cristo Yacente llevaron a hombros a la virgen desde la iglesia de San Mauro y San Francisco mientras que los componentes del Gremio de Labradores portaron al cristo desde su capilla situada en la calle Pintor Casanova.

Minutos después de las nueve y diez de la noche llegó el momento en que se encontraron la Virgen y el Nazareno en el Cantó Pinyó, en la confluencia entre las calles San Lorenzo y San Nicolás y la plaza de España. La música que interpretaban las diferentes agrupaciones enmudeció por unos minutos para dar paso al silencio que fue roto por las saetas. Tras los cantes, los portadores del Cristo y de Nuestra Señora arrodillaron tres veces las dos imágenes ante el aplauso del público.

La procesión siguió por la plaza de España hasta la iglesia de Santa María, donde se quedó la Dolorosa y el Nazareno regresó a su capilla.

«La Burreta»

En este Domingo de Ramos, la iglesia de San Vicente acogió sobre las once de la mañana la bendición de las palmas y los ramos de olivos y laurel. A continuación, tuvo lugar por la zona alta de la ciudad la procesión de «La Burreta», organizada por la cofradía del Cristo Agonizante, que en este 2014 celebra su 50 aniversario. Asimismo, los alcoyanos asistieron a las diferentes bendiciones que se celebraron en las iglesias y en el parque de La Glorieta.