La alarma de fuego volvió a sonar en Mirofret, pero afortunadamente no fue como el día de San José de 1996, cuando la factoría ardió hasta los cimientos, teniendo que ser reconstruida por completo. Ayer, a las 17,20 horas sonó la alarma otra vez, tras declararse un incendio durante el desmontaje de una máquina, según explicaron fuentes de los bomberos y de la Policía Local.

De inmediato, se produjo una humareda negrísima de grandes proporciones, visible en toda la ciudad, pero apenas duró unos minutos ya que con la llegada de las primeras dotaciones de los bomberos de la Montaña -que acudirían con un total de cinco-, se transformó en vapor blanco y luego se apagó.

El siniestro afectó a la nave de Mirofret-tráiler del polígono Santiago Payá, la que se construyó tras el siniestro de 1996, pero en este caso el recinto industrial -que no está operativo- no resultó afectado. Las llamas, atribuidas a una chispa, afectaron a la máquina que se desmontaba y también a algunos materiales almacenados, así como a matorrales en el exterior. A las 18,35 horas, el siniestro había sido dado por apagado, pudiendo retirarse la mayor parte de los efectivos de los bomberos y de la Policía Local que se habían concentrado en la instalación.