Dedicar más tiempo a jugar con sus hijos es el deseo de muchos padres que por trabajo no dedican las horas que les gustaría. Así lo ha puesto de manifiesto un estudio realizado por la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ).

La doctora Petra María Pérez es miembro del Observatorio del Juego Infantil y quien ha llevado a cabo el estudio Ocio y Familia, el cual desvela que de los 700 padres encuestados de toda España, un 54'6% afirman juegan bastante con sus hijos, sobre todo los fines de semana. A grandes rasgos, este estudio pone de manifiesto que se ha modificado el tipo de juego en la actualidad, ya que en otras épocas los niños y niñas salían a jugar a la calle y hoy en día son los padres y las madres quienes comparten este tiempo de juego.

La encuesta, que ha sido realizada a través de las redes sociales, también revela que el salón de casa se ha convertido en el principal escenario de juego entre padres e hijos, ya que un 43'8% de los padres encuestados han confirmado que prefieren este lugar frente a otro 40% que les gusta más ir al parque.

Si se tiene en cuenta el tipo de juguetes que se utilizan, los juegos de construcción y los que desarrollan la creatividad de los niños y niñas son los más utilizados, seguidos de los juguetes para jugar al aire libre y las muñecas, figuras de acción y peluches.

Otra conclusión extraída del estudio Ocio y Familia es que los padres son conscientes de la importancia de compartir tiempo de juego con sus hijos, pues el 85'3% ha manifestado que el juego les ayuda a madurar y por ello es necesario estimularlo. No obstante, también se ha observado que en la actualidad ha aumentado el uso de juguetes electrónicos, lo que pone de manifiesto que los progenitores los consideran un instrumento fácil y eficaz de entrenamiento, a pesar de fomentar el aislamiento.

Con todo, los expertos recomiendan el juego en familia como una fórmula para crear momentos de sosiego, tal y como da a conocer la AEFJ, que insiste en que a través del juego, padres, hijos y hermanos se comunican y disfrutan de un tiempo de calidad juntos, fortaleciendo los vínculos familiares, relajando la presión de la vida diaria y permitiendo disfrutar del momento presente.