La negativa del PP y Compromís vetó ayer la propuesta del gobierno de Alcoy para cambiar la representación de los grupos en las comisiones informativas, un plan que ni siquiera respaldó EU y en el que el PSOE se quedó en solitario. Mientras desde el PP se destacaba la nueva «disensión» en el seno del gobierno, desde el ejecutivo local se denunciaba que los populares están centrando su acción en evitar que su exdil Lucía Granados pueda acudir a las comisiones.

La propuesta irá, en consecuencia, al pleno del lunes con dictamen negativo. El alcalde Antonio Francés insistió en que hay un dictamen técnico favorable y en que «el acuerdo, de no aprobarlo, puede ser nulo de pleno derecho porque vulnera el derecho básico de un concejal a acudir a las comisiones». Por su parte, la edil de Régimen Jurídico, Lorena Zamorano, indicó que la propuesta tiene como objetivo «establecer una fórmula que evite que los ediles no adscritos tengan más derechos que los que la estricta aplicación de la legislación les permite». También señaló que si no se aprueba esto, los tres no adscritos podrán acudir a las comisiones y votar, «con lo que tendrán más representación que los grupos mayoritarios».

Mientras el portavoz de Compromís David Abad indicó que el gobierno ofrece «legislación parcial», desde el ejecutivo local se denunció que el PP está tratando por todos los medios de evitar que Lucía Granados acuda a las comisiones. El portavoz del PP Fernando Pastor negó de plano este extremo, denunció la nueva disensión del gobierno y dijo que «la jugada del pacto [con Sedano] la tenían que haber calculado mejor».