La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, así como el Ayuntamiento de Alcoy, están ultimando la protección del Racó de Sant Bonaventura y Els Canalons a los 12 años de su declaración como paraje natural municipal. La publicación de la declaración de impacto ambiental supone el trámite previo a la aprobación definitiva de la normativa. Las complicaciones técnicas y burocráticas han retrasado hasta la fecha el plan especial del que fue el primer espacio que se acogió a esta figura de protección en la Comunidad Valenciana.

La Generalitat, a iniciativa del Ayuntamiento, declaró el Racó de Sant Bonaventura y Els Canalons paraje natural municipal el 8 de febrero de 2002, convirtiéndose de esta forma en el primer espacio que se acogía a esta figura de conservación. Sin embargo, 12 años después continúa sin plan especial de protección.

Vicent Galbis, técnico del departamento municipal de Medio Ambiente, explicaba que el nuevo gobierno local se fijó como una de sus prioridades consumar los trámites en este sentido, motivo por el que procedió a la redacción del plan especial. Dentro de este recorrido, ayer la Conselleria publicaba la declaración de impacto ambiental de dicho documento, considerándolo «aceptable» y supeditando su aprobación al cumplimiento de una serie de condicionantes, como la obtención del visto bueno de la Confederación del Júcar y la Conselleria de Cultura. Con todo, se espera que los trámites avancen rápido.

Desde el Ayuntamiento se destaca que, en cualquier caso, el paraje ha estado protegido durante este tiempo por la normativa del parque natural de la Font Roja.