Muro ha recuperado la feria de gastronomía, aunque con un nuevo formato. El certamen dejó de celebrarse el año pasado por la falta de subvenciones, y ahora se ha retomado con un menor coste y con las rutas por distintos establecimientos locales como el principal reclamo.

Tal y como informó este diario, el Ayuntamiento de Muro dejó de celebrar el año pasado la feria de gastronomía después de ocho ediciones, debido a la falta de ayudas por parte de otras adminsitraciones.

Tras este paréntesis, el evento volverá los próximos 18, 19 y 20 de octubre, aunque con muchos cambios. Según explicaba el concejal Vicent Molina, «en lugar de montar expositores, lo cual tenía un coste elevado, vamos a llevar a la gente a los propios establecimientos a través de rutas guiadas».

Así, los asistentes tendrán la oportunidad de conocer el paisaje minifundista mediterráneo y vitivinícola de la mano de la bodega Celler La Muntanya, en lo que se ha denominado la ruta de las microviñas.

La segunda propuesta es la ruta gastronómica, en la que participan las carnicerúas María Gloria y l'Ermita y los establecimientos Pastabona, Oli Aromatizat, La Pericana de Muro y Panadería Silvestre. Los participantes podrán comprobar cómo realizaban las generaciones anteriores los embutidos, las conservas y los dulces típicos de la zona. La ruta se completa con una cena opcional en los restaurantes La Música, La Plana, La Vil.leta o Casa Calvo.

La tercera ruta es la del aceite, sólo el 20 de octubre, y consiste en una visita guiada por el Museu Viu de l'Oli y una almazara para comprobar las diferentes formas de producir aceite.

El precio de las tres rutas es de 15 euros y la inscripción se tiene que realizar en la oficina de turismo. Durante los tres días, los restaurantes participantes ofertarán menús a precios especiales, así como los hostales y hoteles Vila de Muro, Señorío de Benàmer, Mas de la Casa Blanca, Aire y Copacabana.

Vicent Molina indicó que el nuevo formato ha permitido pasar del presupuesto anterior de 46.000 euros a sólo 2.000.