La Generalitat Valenciana tiene previsto ceder la titularidad de la carretera que une Castalla y Onil a los ayuntamientos, una medida que no es del agrado del alcalde castellut, Juan Antonio Candela, quien se ha mostrado contrario siempre y cuando no venga acompañada de contraprestaciones que sean de interés para el municipio. Por su parte, el primer edil de Onil, José Ramón Francés, ha declinado hacer declaraciones al respecto a la espera de conocer mejor los detalles.

A través de un decreto, la Generalitat tiene previsto ceder la titularidad de varias carreteras. En concreto, en la comarca de la Foia de Castalla, la administración autonómica quiere traspasar la titularidad de la vía CV-815, la cual une Castalla y Onil.

Esta modificación supondría un gasto añadido para los municipios afectados, ya que desde ese momento tendrían que asumir el mantenimiento de la carretera, del cual hasta la fecha se hacía cargo en Consell.

En este sentido, el alcalde de Castalla, Juan Antonio Candela, ha manifestado su desacuerdo con este tipo de actuaciones por el coste que acarreará a las arcas municipales. No obstante, ha asegurado que «todavía no conocemos bien la letra pequeña», en referencia a que aún no se «nos han explicado todos los matices» del cambio.

Candela, asimismo, ha insistido en que «en el caso de que hubiesen contraprestaciones habría que estudiar mejor el tema», pero también ha reconocido que «aunque no nos guste si al final es una decisión que no tiene vuelta a atrás tendremos que acatarla».

Con todo, el primer edil ha adelantado que en septiembre tienen previsto retomar el tema e «intentaremos negociar» con la Conselleria.

Si bien la postura del gobierno castellut ha quedado clara, el alcalde de Onil, José Ramón Francés, ha declinado hacer declaraciones al respecto, alegando desconocer los pormenores del tema, aunque sí ha asegurado conocer el decreto por el cual la Conselleria traspasa la titularidad de la CV-815 a los ayuntamientos de Castalla y Onil.

Compromís

Sin embargo, desde el grupo en la oposición Compromís per Onil han propuesto al pleno municipal presentar la oposición conjunta a lo que han denominado el «decretazo» del Consell.

Tono Esteve, edil de Compromís, ha manifestado que con este tipo de actuaciones la administración autonómica «solo pretende quitarse la carga económica que suponen las carreteras», así como que resulta sorprendente que «el PP estatal intente recortar las competencias a los ayuntamientos y el valenciano le sume cargas económicas».

Por ello, Esteve considera que «la nueva jugada popular deberá ser considerada nula, ya que obliga a los consistorios» a asumir el mantenimiento de las carreteras «sin pedirles opinión».

Además, el grupo nacionalista en la oposición ha recalcado que «diversos ayuntamientos y las diputaciones de Valencia y Castellón ya se han opuesto», debido a que «resulta dañino para sus intereses al no prevenir ninguna aportación económica por hacerse cargo».

Con todo, desde Compromís per Onil solicitan que el Ayuntamiento pida la anulación del decreto y que haga constar a efectos jurídicos la «no aceptación de este cambio de titularidad», así como que se inicien los contactos pertinentes con la Generalitat para aclarar esta cuestión.