Muro se convirtió ayer en la capital comarcal del carnaval. Miles de personas se dieron cita en este municipio de El Comtat para lucir sus disfraces en el desfile o para ser espectadores de este divertido paseo lleno de originales modelos con toques de color, humor y con mucha música.

El sonido de una batucada sirvió para estrenar este pasacalle carnavalesco que discurrió entre la avenida de Alcoy y la plaza Matzem ante la atenta mirada del público. Unos espectadores que no perdieron detalle de cada una de las indumentarias que grupos de amigos o familias habían confeccionado o elegido para la fiesta de Don Carnal. Y el resultado fue espectacular.

Varios de los participantes optaron por disfrazarse de personajes cinematográficos. Así que por la "alfombra" se pudo ver a Eduardo Manostijeras, Cruela de Vil y a algunos de los dálmatas, varias Mary Poppins o el Zorro y en el apartado de dibujos estuvieron las tortugas ninja, Blancanieves y su príncipe o Los Pitufos. Los videojuegos tampoco escaparon de los disfraces ya que un grupo de amigos iba vestido como Mario Bros.

Otros colectivos basaron su puesta en escena en programas de televisión. De esta manera, por las calles de Muro desfilaron unos roqueros con el grito de "España es heavy" (en alusión al ganador de un programa de cantantes) o a miembros de una tribu, con sus lanzas y trajes típicos, que anunciaban que estaban "Perdidos en Muro". También un grupo de cocineros quiso mostrar cómo se mueve entre fogones.

Una de las carrozas que participó en el evento estaba ambientada en un salón de western con sus clientes y bailarinas, mientras que en otra plataforma, unas peculiares peluqueras peinaban a unas clientas bajo el lema de "antes muerta que sencilla".

Hasta Muro también llegó un barco lleno de vikingos o unos bandoleros que afirmaban que "semos los que vamos a terminar con la crisis". Además, un cuadrilátero acogió varios combates de boxeo y en una piscina, el grupo de natación sincronizada mostró un baile con el ritmo de la canción que ganó el último concurso de Eurovisión, "Euphoria".

Entre los diseños "artesanales" destacaron unas lámparas chinas, unas etiquetas de ropa o unos pastelitos. Tampoco faltaron a la lista de disfraces los clásicos payasos, piratas, marineros, presos, demonios o animales, como gallinas o ranas.

De blanco y negro vistieron unos arlequines o un grupo de mimos, mientras que las princesas tailandesas llevaban unos trajes dorados, plateados o de color azul. Además, entre los participantes varios coros de gospel o una divertida "baturrada".

En este acto humorístico tampoco faltó la referencia a la actualidad. De esta manera, un grupo de amigos se disfrazó de lavadora con oferta incluida: "blanqueamos su dinero negro y no queda ni rastro", se podía leer en los carteles situados en la parte posterior de este electrodoméstico que se coló en la fiesta de carnaval.

Esta localidad de El Comtat cerró la celebración con música ya que estaba previsto que una discomóvil amenizara el carnaval hasta la madrugada.