Los recortes del Consell dejarán a las residencias geriátricas de la provincia con 500 plazas concertadas menos. La medida afectará especialmente a los usuarios con rentas medias y bajas, propiciando al mismo tiempo un incremento de las listas de espera. La reducción, además, comprometerá la viabilidad de algunos centros, que podrían verse obligados a cerrar. Las residencias de Alcoy y Cocentaina serán dos de las más afectadas, dado que entre ambas perderán un total de 94 plazas.
La secretaría autonómica de Autonomía Personal y Dependencia de la Conselleria de Bienestar Social ha elaborado un borrador de las medidas que se van a llevar a cabo para adaptarse a los cambios introducidos en la ley estatal de dependencia. Según ha trascendido, dicho borrador reduce a la mitad las plazas concertadas del plan de accesibilidad, lo que supone un total de 1.937 en la Comunidad Valenciana, 500 de ellas en la provincia de Alicante.
De acuerdo con la información facilitada, la medida afectará de forma especial a los usuarios con rentas medias y bajas, que hasta ahora vienen aportando su pensión a las residencias mientras la Generalitat abona la cantidad que resta para cubrir el coste de la plaza.
La propuesta de la Conselleria pasa por sustituir estas plazas concertadas por una prestación económica vinculada al servicio en las plazas privadas. Este hecho propiciará que los centros concertados no puedan recibir estas prestaciones, que a partir de ahora sólo beneficiarán a los centros de carácter privado.
Las fuentes consultadas por este diario han destacado que la medida provocará un incremento espectacular de las listas de espera, al tiempo que comprometerá la continuidad de las residencias concertadas, que podrían incluso verse forzadas a cerrar.
Por otro lado, la Conselleria aún no ha informado qué va a hacer con los usuarios que hasta ahora han venido disfrutando de las plazas concertadas que van a quedar suprimidas.
Dos de las residencias que se van a ver más afectadas por estos recortes están ubicadas en Alcoy y Cocentaina. En el caso concreto de Alcoy, la residencia de Oliver, que tiene 140 plazas, 102 de ellas concertadas, se quedará con 54 menos. En Cocentaina, también con 140, de ellas 87 públicas, la reducción será de 40. Cabe reseñar que la residencia contestana también cuenta con 30 plazas de centro de día.
Los alcaldes de ambos municipios, los socialistas Antonio Francés y Rafael Briet, se han mostrado muy críticos con la propuesta de la Conselleria de Bienestar Social, que definen como privatización y que, en su opinión, supone un "incumplimiento flagrante" del artículo 14.2 de la Ley de Dependencia.
Además, agregaron, la eliminación de las plazas concertadas supone en la práctica que las personas mayores dependientes con rentas más bajas no podrán acceder al sistema residencial. Los primeros ediles llamaron la atención sobre el hecho de que una plaza pública o concertada es la única que garantiza el acceso de cualquier persona a la red independientemente de su situación económica, ya que es el único tipo de plaza que no exige ninguna aportación por encima de la pensión.
El alcalde de Cocentaina, Rafael Briet, manifestaba que "la Conselleria, con esta orden, condena a cientos de mayores dependientes del municipio y la comarca de El Comtat a no poder acceder a una residencia en su municipio, y supone el primer paso en el desmantelamiento de la red pública y concertada que se creó en los últimos años a raíz de la Ley de Dependencia. Además, las residencias pueden dejar de ser viables y verse abocadas al cierre, lo que en el caso de Cocentaina sería un auténtico desastre", aseveró.
Por su parte, el alcalde de Alcoy, Antonio Francés, denunciaba que "la supresión de los conciertos y la privatización total de las plazas va a generar que la lista de espera para poder entrar en una residencia de la red pública y concertada se alargue en más de un año a los plazos actuales, condenando a muchos alcoyanos dependientes a fallecer sin poder recibir los servicios de atención a los que tienen derecho. Se trata de un nuevo ataque del gobierno autonómico a la población con menos recursos".
Los alcaldes han mostrado su esperanza de que la Conselleria de Bienestar Social "recapacite" y varía la propuesta planteada en el borrador que, afirman, pretende aprobar de manera inmediata.
Las fuentes consultadas por este diario significaron que Elche será otro de los municipios que se verá más afectado por este recorte de plazas concertadas.
