UGT pide apartar al capataz de las brigadas del incendio

Tal y como ha venido informando este diario, un agente medioambiental y un brigadista perdieron su vida a consecuencia de un incidente registrado mientras participaban el pasado día 12 de agosto en las tareas de extinción del incendio que calcinó 600 hectáreas de monte en los términos municipales de La Torre de les Maçanes, Penàguila y Benifallim. En el mismo percance resultaron heridos otros cuatro brigadistas, dos de los cuáles permanecen ingresados todavía en centros hospitalarios de Alicante y Murcia.

Desde un primer momento hubo críticas de los propios afectados por el lugar en el que los habían colocado y la táctica empleada para hacer frente a las llamas. Según narraba uno de los heridos, les ordenaron practicar un contrafuego en la estrecha carretera que enlaza los puertos de Benifallim y Tudons, cuando el frente del incendio avanzaba directo hacia ellos. Pese a que en un principio las llamas se acercaban despacio, de repente cobraron más velocidad y pasaron sobre ellos, con las trágicas consecuencias antes citadas.

Además, fuentes consultadas por este diario explicaron que en los casos en que se decide realizar un contrafuego es necesario que se cumplan una serie de requistos de seguridad, como es el caso de un observador que vigile el avance del incendio, así como algún apoyo aéreo, lo que al parecer no se cumplió en esta ocasión. Por otro lado, parece que las vías de escape no estaban claras.

Con todos estos antecedentes, y según la información a la que se ha tenido acceso, el sindicato UGT ha solicitado a la empresa Tragsa que aparte del servicio, al menos momentáneamente, al capataz coordinador que estuvo al frente de las brigadas implicadas en el percance. A la hora de justificar esta solicitud, se esgrime que los brigadistas han perdido su confianza hacia esta persona, y que resultaría conveniente que dejase de ejercer de forma provisional mientras se esclarece lo sucedido.

Cabe reseñar que además de este capataz, en un primer momento se difundió la información de que el jefe de actuación en el incendio, un sargento perteneciente al parque principal del Consorcio Provincial de Bomberos en San Vicente del Rapeig, había sido relevado de sus funciones. Sin embargo, posteriormente tanto la Diputación como la Conselleria de Gobernación negaron este hecho.

Paralelamente, hay abierta una investigación judicial para determinar lo sucedido y concretar las posibles responsabilidades que se puedan derivar de los hechos que terminaron con el fallecimiento del agente medioambiental y del brigadista.

La Diputación apoyará a los alcaldes de las zonas afectadas en la petición de ayudas

La presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, estuvo ayer por la tarde con los alcaldes de La Torre de les Maçanes, Penàguila y Benifallim visitando la zona afectada por el incendio que se declaró hace poco más de dos semanas y que arrasó 600 hectáreas. La mandataria indicó que fue un fuego "importante para la provincia" y además destacó la "preocupación" de los primeros ediles "con sus vecinos". En estos momentos, "lo que están haciendo desde los ayuntamientos es recabar información y ver el daño que se ha producido", según Pastor, quien añadió que "es importante tener ese informe claro para después si se habilitan las ayudas necesarias poder tener un conocimiento exacto". El objetivo, señaló, es "poder, conjuntamente, transmitirlo a la Generalitat".

Al ser preguntada si el ente provincial habilitará ayudas dijo que "primero vamos a informarnos de los daños producidos y tener un análisis de la situación, y en función de eso ya tomaremos las decisiones que correspondan". m.vicedo