La jornada festiva arrancó de madrugada, al nuevo horario establecido de las 5,45 horas, con el rezo del Ave María y la colocación de la enseña de la Cruz en el castillo de Fiestas, para dar paso a la Diana. El público, como es habitual, llenó por completo la plaza de España y aplaudió a rabiar la "arrancà" de los cabos de las diferentes escuadras.

El privilegio del estreno corrió a cargo del sargento cristiano, con la filà capitana Cides, poniendo en marcha la primera escuadra, a las que siguieron las restantes 13 de este bando. A las 6,40 horas, empezaron los moros, con el sargento a la cabeza de los Berberiscos, que este año lideran el bando moro.

Las distintas formaciones fueron completando el itinerario, por diferentes calles del casco antiguo, hasta llegar al Partidor, donde tuvo lugar la segunda "arrancà", también entre una multitud.

El desfile, explicó el ponente de Fiestas de la Asociación de San Jorge Jordi Payá, transcurrió con total normalidad y acabó a las 9,32 horas. "La Diana se ha terminado con 3 minutos de retraso, lo que está muy bien", señaló.