Alrededor de 40 personas se concentraron en la fachada de Santa María para mostrar su desacuerdo con el acto militar, así como con el fuerte desembolso que supone para los presupuestos del Estado el mantenimiento del Ejército. Los asistentes, que fueron identificados por la Policía, llevaron a cabo la protesta de forma pacífica y se limitaron a mostrar una pancarta en la que se podía leer "Cap ejèrcit defensa la pau".

Cabe recordar que la parada militar provocó divergencias internas en el tripartido de Alcoy, dado que EU reprochó a sus socios de gobierno que accediesen a la celebración de un acto que, según esta formación, ensalza los valores militares y patrióticos, contrarios en su opinión a la democracia y el progreso.