La Conselleria de Educación finalmente ha decidido suprimir una unidad de Infantil del colegio Rico Sapena de Castalla y otra de Primaria en el Pla i Beltrà de Ibi. La medida adoptada, asimismo, se hará efectiva para el próximo curso 2012-2013.

Educación ha ratificado el cierre de dos aulas en dos centros de la Foia de Castalla. La medida se efectuará el próximo curso a pesar de que los respectivos consejos escolares municipales habían presentado las pertinentes alegaciones.

Tal y como ya informó en su momento este diario, la administración autonómica planteó la supresión de cinco unidades en las comarcas de l'Alcoià, El Comtat y la Foia de Castalla. Benilloba y L'Orxa, pertenecientes respectivamente a las dos primeras zonas, finalmente han conseguido mantener todas sus aulas para el curso 2012-2013. Cabe destacar que es el segundo año consecutivo que el colegio comarcal de Benilloba consigue salvar una de sus aulas.

Desde Comisiones Obreras (CC OO), Paco Sánchez expresó que se han cumplido los principales objetivos, ya que estos dos municipios se encuentran en zonas rurales "que corren el riesgo de despoblarse si se carece de servicios como la educación".

Sin embargo, en el caso de Castalla, el colegio Rico Sapena finalmente contará para el próximo curso con una unidad menos de Infantil, mientras que ha ganado otra de Primaria. El director del centro, José María Cuesta, ha señalado que se trata de "una recolocación de aulas", es decir, que un grupo de niños y niñas de Infantil pasan a Primaria, siendo necesaria otra unidad de este último ciclo. Sin embargo, la falta de escolares de Infantil propicia la supresión de un aula de este tramo de edad.

El caso del Pla i Beltrà también es diferente. Por un lado, la Conselleria de Educación planteó la posibilidad de eliminar una clase de Infantil, igual que en el caso anterior, pero finalmente esta medida no se llevará a cabo. No obstante, la decisión del departamento autonómico de suprimir una unidad de Primaria si se hará efectiva en septiembre de este mismo año.

En este caso, la clase que la Generalitat ha decidido eliminar corresponde a la línea de valenciano, ya que, según la información a la que tuvo acceso este medio en su momento, la ratio es de 10 alumnos y en esta unidad sólo se han escolarizado nueve, así como otros quince en la conocida como línea en castellano, lo cual ha propiciado que Educación haya decidido unir ambas clases para el próximo curso.

Ya en su momento, el concejal ibense de EU, Santiago García, aseguró que "esta medida atenta contra la libertad de los padres y madres de decidir a qué centro y en qué idioma quieren que estudien sus hijos", así como recordó que ya "en primero de Primaria unificaron las líneas".