La falta de calefacción por el impago del suministro de gasóleo en dos institutos alicantinos de Educación Secundaria, uno en Muro y otro en Castalla, ha dejado casi vacías las aulas, y los pocos estudiantes que han acudido lo han hecho con mantas, guantes, abrigos y gorros.

Desde ayer no quedan reservas de combustible energético en los institutos de Educación Secundaria (IES) "Serra de Mariola", en Muro, y en el IES de Castalla, dos localidades ubicadas en las comarcas interiores de esta provincia y en las que se alcanzan temperaturas muy bajas durante la temporada invernal.

La deuda que mantiene la Conselleria de Educación con ambos centros a la hora de abonar los pagos derivados del servicio de calefacción ha derivado en la imposibilidad de estos dos institutos de hacer frente a la contratación de nuevos suministros de gasóleo.

En el caso del IES de Muro, la Consellería de Educación adeuda a este centro las aportaciones para gastos de funcionamiento desde el segundo cuatrimestre de 2011, según datos aportados por fuentes próximas al instituto.

Sólo algunos de los alumnos han acudido esta mañana a las aulas, y lo han hecho en bata y con mantas para combatir las bajas temperaturas.

Por lo que respecta al IES de Castalla, el 98% de los estudiantes han secundado una huelga para protestar por los impagos.

Su director, Juan Antonio Olmedo, ha afirmado hoy que habrá nuevas protestas pasado mañana y que los alumnos que sí han acudido a clase portaban ropa de abrigo "para no pasar frío".

Estas movilizaciones se suman a las iniciadas ayer por los estudiantes del ciclo de Grado Superior en Guía, Información y Asistencias Turística del instituto de Muro, que decidieron abandonar el centro "ante el frío que hacía en las aulas".

Su director, Vicent Martínez, ha explicado que esta decisión de los alumnos "se mantendrá hasta que las condiciones para recibir formación sean las adecuadas".

Martínez ha asegurado que las últimas reservas de gasóleo se agotaron a última hora de la mañana de ayer y que el centro no puede reponer el suministro al carecer de fondos.

Según ha expuesto, la Generalitat Valenciana adeuda a este centro las aportaciones para gastos de funcionamiento desde el segundo cuatrimestre de 2011.

Esta situación ha sumido al centro en un "grave estado económico" que no permite hacer frente a las facturas de los proveedores que proporcionan al centro "elementos indispensables como la luz, el gasóleo para la calefacción o el papel para las fotocopias".

Si la Generalitat continúa sin pagar sus deudas, "las instalaciones quedarán clausuradas por falta de suministro eléctrico", ha añadido.