Todo Alcoy vive pendiente de la inminente llegada de los Reyes Magos, después de que anoche el Embajador recorriera las abarrotadas calles de la ciudad anunciando a los cuatro vientos que Melchor, Baltasar y Gaspar volverán a desfilar hoy en una Cabalgata que cumple nada menos que su 127 edición. El emisario declamó un texto redactado en esta ocasión por Ana María García, mientras multitud de niños y niñas depositaban las cartas con sus ilusiones en los buzones transportados por ocho burritas.

A tan sólo un día para que Melchor, Baltasar y Gaspar hiciesen su entrada en la ciudad, el Embajador Real anunció ayer la llegada de Sus Majestades acompañado por un séquito de más de 500 personas, entre pajes, músicos, el pueblo y los personajes del Tirisiti.

A las 19 horas el Bando Real arrancó desde la Zona Alta seguido de las ocho burritas que portaban los tradicionales buzones donde los más pequeños, y algunos mayores, depositaron la carta a los Reyes Magos con la ilusión de que hoy sus sueños se hagan realidad.

Este año, la Asociación de San Mauro Mártir ha sido quien se ha encargado de acompañar al emisario real, mientras que el texto que leyó para comunicar la llegada de Sus Majestades es obra de Ana María García Pascual, secretaria de dicha entidad.

Desde primera hora de la tarde se pudo observar en las calles más céntricas del municipio el nerviosismo de los niños y niñas que empezaban a concentrarse a la espera de la llegada del Embajador.

Y, tal y como manda la tradición, a las 18'30 horas el Tio Piam, acompañado por los personajes del Tirisiti, realizó el típico pregón a las puertas del Teatro Principal. Desde allí, ascendieron la calle San Nicolás hasta llegar a la Font Redona, donde estos característicos personajes alcoyanos recibieron al emisario real acompañados por multitud de niños y niñas que se fueron uniendo por el camino.

"Xiquets i xiquetes d'Alcoi, escolteu amb atenció allò que m'han dit. Porte un missatge molt gran: demà al fer-se poqueta nit, els Reis Mags d'Orient ací arribaran". De esta forma el Embajador declamaba a los cuatro vientos la buena nueva, invitando al público que abarrotaba las calles a acudir esta tarde, a partir de las seis, a recibir a Sus Majestades.

Será, además, una Cabalgata especial, dado que en su 127 edición estrenará la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), distinción ésta concedida por la Generalitat y que la reconoce como la más antigua de España y también sus singulares características.