Los alcaldes de las poblaciones afectadas por el pavoroso incendio forestal que, hace justo un año, arrasó un amplio territorio de las comarcas de El Comtat y la Vall d'Albaida junto a la sierra de Mariola acordaron ayer diseñar un plan de regeneración de la zona siniestrada, ante la inactividad del Consell.

En una sesión celebrada ayer en Ontinyent, a la que acudieron el alcalde de Agres, Josep Manel Francés, y Raquel Vicedo en representación de Alfafara, se acordó "unificar posturas, coordinar actuaciones y exigir a las administraciones que trabajen no solo en recuperar los parajes perdidos, sino también en tareas de prevención de incendios", según explicó Jorge Rodriguez, responsable del Ayuntamiento anfitrión.

Así, se acordó solicitar una reunión conjunta con la Conselleria de Medio Ambiente, "para exponerle un plan común con una serie de inversiones, actuaciones y fechas de ejecución concretas", a la vez que los consistorios se comprometen a "poner su grano de arena", a través de la elaboración de un estudio común de toda la zona siniestrada para coordinar al máximo las actuaciones de recuperación de la sierra de la sierra, reforzar la labor de las brigadas existentes y solicitar la implantación de otras nuevas.

Además, los alcaldes se han comprometido a incentivar la labor de los voluntarios y a trasladar a las escuelas un plan de educación ambiental que permita lanzar semillas desde avionetas, a través de bolas de barro hechas por los escolares.

Hay que recordar que el incendio de referencia se declaró en la noche del 6 de septiembre de 2006 y acabó afectando a unas 2.500 hectáreas; a pesar de que se inició en el término de Alfafara y afectó al de Agres, la mayor parte del desastre se cebó en Bocairent, Agullent y Ontinyent, localidades en las que fueron desalojadas múltiples viviendas.

Los alcaldes, por último, analizaron el conflicto en torno a la nueva línea eléctrica y acordaron mantener nuevos contactos.