Rafel Carbonell, líder del Bloc, representa la fuerza política que más ha crecido en Alcoy en las municipales, al pasar de 2 a 5 concejales, lo que prácticamente le da la llave de la gobernabilidad.

El Bloc ha experimentado un impulso en Alcoy, por encima incluso de la pérdida de votos que ha registrado el PSOE, lo que le lleva a plantearse incluso liderar un gobierno de concentración.

¿Hay algún escenario que no se plantee en estos momentos?

Nosotros apostamos por la concentración y si no es posible, lo haremos por el cambio. El único escenario que no contemplábamos, ni tampoco ahora, es el de dar soporte al gobierno actual.

¿El apoyo que han registrado tiene alguna base concreta?

Nos ha votado muchísima gente con formas de pensar diferentes, a las que agradecemos su apoyo. Pueden estar seguros de que somos responsables y estaremos a la altura de las circunstancias. No nos creemos lo que no somos y estaremos a la altura de las necesidades de Alcoy.

¿Los proyectos más conflictivos se van a llegar a debatir?

Los proyectos más conflictivos como el hotel de la Font Roja, el campo de golf de Xirillent o La Canal, ni siquiera van a estar encima de la mesa de negociación.

¿Cree que será difícil que los grupos de izquierdas lleguen a un acuerdo?

Si no hay problemas partidistas, difícil no será. También son importantes las relaciones y las actitudes y ahora hay mucha gente con la que nos podemos poner de acuerdo, más allá de la lucha partidista. Las actitudes personales favorecerán la situación para que se pueda conseguir un acuerdo.