Salvem la Valleta ha alertado de los daños que están causando los conejos en las zonas próximas a los terrenos afectados por el incendio que se produjo el pasado mes de septiembre en la Vall d'Albaida y El Comtat, concretamente en Alfafara y Agres. Asimismo, Alvar Seguí, agente medioambiental, ha explicado que entre Penàguila y Benilloba también se ha detectado una superpoblación de estos herbívoros "que están causando daños, sobre todo, en el olivar joven".

La proliferación de conejos parece ser que está suponiendo un problema para los agricultores de Alfafara y Agres, terrenos que, además, se encuentran próximos a la zona afectada por el incendio que se originó el pasado mes de septiembre y afectó tanto a la Vall d'Albaida como al Comtat.

Al parecer, según ha señalado la plataforma Salvem la Valleta, "los conejos se comen tanto las raíces como los tallos de las plantas". Asimismo, han destacado que durante los días del incendio "la empresa encargada de talar y desbrozar los barrancos para que el fuego no llegase más allá de donde estaba, se llevaron toda la madera que talaron, dejando allí numerosas ramas".

En este sentido, la plataforma ha recalcado que con esta actuación los barrancos se han convertido en un sitio idóneo para que "la plaga de conejos que padecen las comarcas pueda seguir creciendo".

El alcance de los desperfectos va en aumento debido a que "no se ha buscado ninguna solución, ni antes ni después del incendio". Esta situación se suma a lo sucedido con los jabalíes. Cabe recordar que después del incendio, estos animales se trasladaron desde las montañas a los terrenos de cultivo en busca de alimento.

Con todo, la plataforma Salvem la Valleta solicitan a la Conselleria de Agricultura y a la de Medio Ambiente que actúen "de forma conjunta de una vez por todas" con el fin de "paliar los efectos negativos que provoca la fauna salvaje sobre los cultivos y que ahora se han visto incrementados como consecuencia del incendio".

Más deterioro

Alfafara y Agres no son las únicas zonas cuyos agricultores están padeciendo las consecuencias de la proliferación de conejos, aunque, tal y como se ha destacado, el fuego que se originó en terrenos próximos está agravando la situación.

Al parecer, según ha explicado Alvar Seguí, agente medioambiental, entre Penàguila y Benilloba se ha detectado una superpoblación de estos herbívoros. Entre sendas poblaciones hay varias fincas que están sufriendo daños en sus cultivos.

En concreto, en el Mas de la Casa Blanca "están perjudicando, sobre todos, al olivar joven", según ha destacado Seguí, quien, además ha asegurado que ante este tipo de plagas "una de las medidas que se deberían tomar es la de crear márgenes", pero hay otras formas de parar los daños.