El Ministerio de Defensa ha concluido los trámites para la desmilitarización del acuartelamiento de Aitana, al tiempo que ha ofrecido a la Generalitat la venta de las instalaciones para que se les pueda otorgar un uso público. El Consell, sin embargo, aún no ha contestado a la propuesta de negociación, pese a que había anunciado tiempo atrás su intención de colaborar en un proyecto cuyo objetivo pasaría por aprovechar los edificios existentes para crear un albergue y aulas formativas, entre otros servicios.

Tal y como ha venido informando este diario, el Ministerio de Defensa inició hace un año los trámites para desmilitarizar el acuartelamiento de la base de Aitana, situado en el puerto de Tudons, dentro del término municipal de Alcoleja. La decisión se adoptó después de que las instalaciones dejasen de prestar servicio en 2006, coincidiendo con una reducción del personal militar, el cual ha quedado concentrado en la zona de radares, en la cima de la sierra, que continúa operativa.

Según la información facilitada, los trámites para la desmilitarización ya han llegado a su término, de manera que el acuartelamiento está declarado en la actualidad como zona sin interés para el Ejército. Con esta decisión ya no existe ningún impedimento para que se pueda otorgar un uso público a las instalaciones, tal y como ha venido solicitando el Ayuntamiento de Alcoleja, secundado también por los de Confrides, Sella y Benifato.

En esa línea, y según ha podido saber este diario, la dirección general de Infraestructuras del Ministerio de Defensa remitió semanas atrás una propuesta de negociación a la Generalitat. Las fuentes consultadas han manifestado que, como es habitual en estos casos, la política del Ministerio es vender los terrenos e instalaciones que quedan en desuso y, en función del destino que vayan a tener, fijar un precio y unas condiciones.

En este caso el ofrecimiento ha sido para la Generalitat, habida cuenta que tanto esta institución como la Diputación Provincial de Alicante serían las encargadas de liderar el proyecto de uso público del acuartelamiento. Como ya se ha informado, el objetivo sería adecuar los actuales inmuebles e infraestructuras del ex complejo militar para dedicarlas a albergue y aulas de formación, entre otros servicios.

Cabe reseñar, en este sentido, que el pasado mes de mayo el gobierno autonómico del PP aceptada una proposición no de ley presentada por el PSOE, a través de la cual expresaba su predisposición a colaborar en el desarrollo del proyecto y entablar conversaciones con el propio Ministerio para concretar los detalles de la iniciativa y abordar posibles fórmulas de financiación.

Sin embargo, y de acuerdo son las aludidas fuentes, el Consell ha ofrecido hasta el momento la callada por respuesta a las misivas ministeriales, con lo que de momento no se ha producido contacto alguno en este sentido.

Desde el PSOE se ha lamentado la "indiferencia" mostrada por el ejecutivo autonómico, censurado que ni tan siquiera haya contestado a las propuestas de negociación.

Un centro dedicado

al medio ambiente y

a la cultura de la paz

El Ayuntamiento de Alcoleja, en cuyo término municipal se encuentra ubicado el acuartelamiento de Aitana, presentó en su momento un proyecto inicial para el aprovechamiento de las instalaciones. De acuerdo con dicha propuesta, el objetivo inicial pasaría por poner en marcha un albergue juvenil, así como una serie de aulas temáticas sobre el medio ambiente y el papel que desempeñan las Fuerzas Armadas en el mantenimiento de la paz.

El proyecto en este sentido está abierto, de manera que tampoco se descartan otras utilidades como un centro para mayores, dependencias para brigadas forestales y salas de conferencias y exposiciones, entre otros servicios. Cabe reseñar, en este sentido, que el complejo está situado en una zona de alto valor paisajístico y medioambiental, en las estribaciones de la montaña más alta de la provincia, lo que supone un valor añadido a la hora de captar usuarios.

De cualquier forma, desde el Ayuntamiento de Alcoleja se ha insistido en la necesidad de que los trámites para posibilitar esta iniciativa se agilicen al máximo, toda vez que el abandono está empezando a hacer mella en los edificios del acuartelamiento y poco a poco van deteriorándose, lo que cada vez obligará a realizar unas inversiones mayores para adecuarlos a sus nuevas funciones.