Correos volvió ayer a su tradicional sede en la plaza Emilio Sala, tras las obras de mejora y ampliación de este inmueble. La inversión realizada se ha situado por encima de 1,7 millones de euros. y ha servido para suprimir las barreras arquitectónicas y adaptar los espacios a las necesidades actuales del servicio. El proceso de remodelación ha durado tres años, cuando inicialmente debería haber sido solamente uno, y durante todo este tiempo los servicios postales han estado ubicados en un local provisional en el barrio de Santa Rosa.

Tal y como ha venido informando este diario, Correos planteó en 2007 una reforma integral de su edificio en la plaza Emilio Sala, para lo cual se trasladó en verano de ese año a unos locales situados en la calle Maestro Espí, al tempo que alquilaba unárea de parking al centro comercial de Alzamora.

En un principio la actuación tendría que haber durado un año, pero las obras no se acometieron hasta junio de 2008 y posteriormente, cuando ya habían finalizado, los problemas con una conexión eléctrica propiciaron un nuevo retraso.

Con todo, y una vez subsanados todos los problemas, los servicios postales reabrieron ayer las puertas de su renovada sede. La reforma, presupuestada en más de 1,7 millones de euros, ha supuesto una mejora en la distribución de los espacios destinados a la atención al público y al reparto, el acristalamiento de las fachadas de la oficina, la supresión de las barreras arquitectónicas y, en definitiva, la adaptación de los espacios a las necesidades actuales del servicio.

La oficina atiende desde ayer al público en horario continuado de 8,30 a 20,30 horas, de lunes a viernes, y de 9,30 a 13 horas los sábados.

Apartados postales

Por otro lado, en el establecimiento se han instalado 468 apartados postales para aquellos particulares o empresas que deseen contratar este servicio. También se han abierto puestos de atención al público diferenciados para los servicios de Western Unión y BanCorreos. La unidad de reparto, asimismo, ha quedado ubicada en la primera planta del inmueble.

En la oficina se puede desde remitir una carta, un paquete o un giro, hasta contratar los servicios bancarios de BanCorreos, pagar la factura de la luz, el teléfono o el gas, enviar dinero en minutos a más de 190 países por medio dse Western Unión o recargar el teléfono móvil.

La primera jornada operativa de la remodelada sede transcurrió ayer con total normalidad, según la información facilitada desde la entidad, y los clientes ya pudieron disfrutar de las nuevas instalaciones y utilizar los diferentes servicios puestos a su disposición.

Los responsables de Correos destacaron ante todo la supresión de las barreras arquitectónicas, así como la mayor amplitud de los distintos departamentos, lo cual sabrán agradecer tanto los clientes como los propios empleados del servicio postal.