El alcalde de Alcoy, Jorge Sedano, calificó ayer de "mini brote" la última crisis epidemiológica por la legionela que ha registrado la ciudad y que se mantiene estable en cuatro casos, sin que se haya notificado la declaración de alguno nuevo durante toda la presente semana.

El decimosexto brote de legionela de Alcoy fue declarado oficialmente el viernes de la semana pasada, por el propio director general de Salud Pública, Manuel Escolano, tras haberse diagnosticado por las autoridades sanitarias cuatro casos agrupados de legionela; esto es, con un origen común. "No hay novedad con la legionela" dijo ayer Sedano. "Parece que ha sido un brote muy pequeño, un mini brote, y que se ha detectado por el control exhaustivo que hay en Alcoy; en cualquier otro sitio, ni se habría sabido", agregó.

El alcalde hizo hincapié, además, en que todavía no se ha conseguido localizar el origen del brote, pero matizó que será complicado lograrlo. "Con tan pocos casos, será difícil localizar el foco del brote, ya que no ha tenido apenas consistencia como para poder identificarlo", significó.

Hay que subrayar que las autoridades sanitarias utilizan los rasgos en común de los afectados -lugares de residencia o laborales, o zonas por las que se mueven- para triangular el foco original, algo complicado en esta ocasión al tratarse de cuatro casos exclusivamente.