Las generosas lluvias y nevadas del invierno han contribuido a recuperar los acuíferos y a que los ríos discurran vigorosos por los barrancos de la comarca. Una evidencia de ello es el pantano de Beniarrés, que ha alcanzado el segundo mejor nivel de la última década al situarse a casi un 90% de su capacidad, sin contar las precipitaciones de los último dos días. A escasa distancia, el Barranc de l'Encantà luce un aspecto inmejorable con espectaculares saltos de agua, lo cual se ha convertido en un polo de atracción para los excursionistas.

La recuperación de los acuíferos se puso en evidencia hace escasos días, cuando el manantial del Molinar, del que se abastece a Alcoy, volvió a aflorar a la superficie, brindando a los caminantes el espectáculo de las cascadas secas desde hace tres lustros.

Con todo, este fenómeno es extensible al conjunto de la comarca. Una evidencia de ello lo constituye el pantano de Beniarrés, que está prácticamente a rebosar. Según los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), el embalse se encuentra al 88,84% de su capacidad, lo que supone 23,99 hectómetros cúbicos. Esto implica la segunda mejor cota del mes de mayo en los últimos diez años, sólo superada por la de 2008, cuando el pantano se situaba al 90,87% de su capacidad. De hecho, los últimos tres años han sido muy positivos para el embalse, dado que en 2009 el nivel también fue alto.

En el lado contrario se sitúan los primeros años de la década. En 2000 el pantano se encontraba en el mes de mayo a sólo un 43% de su capacidad y en 2001 a un 53%. En los ejercicios posteriores se ha estado moviendo alrededor del 70%, hasta llegar a 2008, cuando saltó al citado 90.87%. El agua de este embalse es aprovechada básicamente para regar las huertas de la comarca valenciana de la Safor, por donde discurre el Serpis.

Pero esta generosidad fluvial no se limita sólo a las frías estadísticas y a los aprovechamientos hidráulicos. A escasa distancia del pantano, el Barranc de l'Encantà, situado entre los términos municipales de Planes y Beniarrés, luce en la actualidad su mejor imagen. Los saltos de agua y el vigoroso aspecto del río hacen las delicias de los excursionistas, que sobre todo durante los fines de semana se acercan a la zona para disfrutar del espectacular paisaje.