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Jorge Sedano aspira, como ha anunciado, a la Alcaldía de Alcoy, pero para ello deberá obtener el aval del presidente de la Generalitat y máximo responsable del PP en la Comunidad, Francisco Camps, con el que mantiene un fuerte enfrentamiento político desde hace años. Esta pugna se ha traslado al ámbito local desde las elecciones al congreso provincial, con una pugna continua con Amparo Ferrando y Trini y Rafa Miró, todos los cuales se han alineado con el bando campista.
Sedano tiene una mayoría absoluta ajustada -13 concejales contra 12 de la oposición-, pero en realidad gobierna con 12, ya que en diciembre de 2008 cesó de todas sus competencias a Amparo Ferrando después de que esta tomara posesión como diputada en el Congreso. Desde entonces, Ferrando asiste a las comisiones que le competen y a los plenos, pero sin poder formalizar intervención alguna.
Que las relaciones con la actual consellera de Cultura Trini Miró y su secretario autonómico no son buenas, es algo que se evidenció recientemente con la entrega de las medallas a los ex concejales. La consellera pidió que se aplazara el acto unas horas para poder asistir, por estar en el pleno del Consell, pero desde la Alcaldía se respondió con una rotunda negativa; de hecho, aún no ha podido recoger su medalla.
Ahora, el sector predominante en el PP local se encuentra ante la disyuntiva de que puede aprobar su candidatura para las elecciones sin problema alguno, pero luego la tiene que respaldar Madrid a propuesta de la presidencia autonómica, y ahí es donde puede haber problemas.
Como mínimo, esta reválida ante el sector opuesto debería conllevar un acuerdo previo entre ambas partes, con el fin de evitar que pudieran surgir problemas, nada recomendables en un período preelectoral. No es previsible que haya novedades a este respecto a muy corto plazo.
