El grupo Monllor de Alcoy cesará en su actividad a finales de la próxima semana -presumiblemente, el viernes-, poniendo fin a 159 años de ininterrumpida actividad industrial, sobre todo textil, y con la particularidad de que se ha desarrollado en el mismo sitio: justo al lado del puente de Cervantes. Es la empresa en activo más antigua de Alcoy y todo apunta a que también de la provincia, aunque un incendio que calcinó décadas atrás los archivos de la Cámara de Comercio de Alicante impide la certeza absoluta. La desaparición del grupo Monllor es considerada en medios económicos la evidencia clara de la profunda crisis de la industria tradicional.

Roque Monllor Pérez, como tantos otros alcoyanos a lo largo de la historia, era hijo de un pequeño empresario textil; formado él mismo en estudios técnicos, decidió abrir su propia fábrica, que sería el Tint de la Bolta. Lo construyó y puso en marcha en 1850 y allí ha estado operativo hasta ahora; la empresa pasó a llamarse Viuda de Roque Monllor tras su muerte, ya que la gestionó su esposa Lucía Aura, y más tarde Hijos de Roque Monllor.

En las últimas décadas se había configurado el denominado Grupo Monllor, integrado por cinco empresas: Hijos de Roque Monllor, Acabados Monllor, Tintes Bolta, Monllor Hermanos y Transportes y Servicios Monllor. El año pasado, concretamente el 14 de mayo, la dirección del grupo presentaba suspensión de pagos, acreditando un pasivo de cerca de 7 millones de euros, y después de que los propietarios hubiesen desembolsado en los últimos tiempos 4,8 millones de su patrimonio, con el fin de que la actividad pudiese continuar.

La dirección achacó sus problemas a la grave crisis del sector y a la imposibilidad de trasladar sus instalaciones a Cotes Baixes a unos terrenos adquiridos, debido a que el Ayuntamiento rechazaba recalificar a urbanizable el solar de la sede actual, por los problemas registrados con La Estambrera. Curiosamente, ahora no habrá problemas para la recalificación, dado que el PGOU vigente prevé que el suelo industrial en desuso en el casco urbano pase a urbanizable.

Simultáneamente a la suspensión de pagos, la plantilla de casi 80 trabajadores quedó reducida a la mitad y posteriormente a la cuarta parte. El rechazo la semana pasada de la junta de acreedores a los convenios judiciales propuestos para Hijos de Roque Monllor y Acabados Monllor, precipitaba los acontecimientos. La compañía, que ya había cerrado las otras tres empresas, decidía clausurar las dos restantes, despidiendo a los 17 últimos trabajadores. "Se ha conseguido que estos empleados cobren hasta el 30 de junio y la semana que viene, a finales de mes, se acaba todo", manifestó un portavoz del grupo.

Estas empresas han centrado su producción desde el primer día en la tintura y los acabados textiles, "una parte fundamental de la producción textil, la que da valor añadido al producto", resaltan las fuentes consultadas. A partir de ahí, se fue constituyendo un conglomerado anexo que durante 159 años había soportado cambios de régimen, guerras y mil y una crisis textiles, hasta que la actual ha hecho inviable la continuidad.

Es el segundo buque insignia del textil de la ciudad de Alcoy que desaparece en este ciclo económico negativo, tras la Estambrera, baluarte de la segunda mitad del siglo XX.