El Ministerio de Medio Ambiente eliminará el muelle de hormigón abandonado de la cala del Morro Blanc. La Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar ha licitado la redacción del proyecto para acondicionar este enclave de la zona norte de El Campello, que incluye la demolición de la obsoleta estructura de atraque, que permanece abandonada y está vallada por el peligro que representa.

La adjudicación se culminó el pasado mes de diciembre, con un contrato que ronda los 20.000 euros. El plazo de ejecución para la redacción del proyecto es de 24 meses, con el objetivo de recuperar ambientalmente la zona y mejorar su seguridad, atendiendo así a la petición del Ayuntamiento de El Campello, que había trasladado en varias reuniones con el Servicio Provincial de Costas la necesidad de demoler las estructuras existentes para acondicionar la cala.

Según recoge el pliego de condiciones de la adjudicación, la estructura de atraque de hormigón «se encuentra deteriorada por falta de uso y mantenimiento. El muelle ha sufrido el efecto del oleaje y presenta socavaciones que han obligado a impedir el acceso a los usuarios de la playa por riesgo para su integridad. La demolición y total retirada es necesaria para recuperar la calidad ambiental y la seguridad de la cala».

El documento alerta que «tanto a sotamar como a barlomar de la estructura existen unas pequeñas playas cuyo origen está relacionado con la dinámica litoral inducida por la presencia del propio dique. La retirada del mismo dará lugar a una dinámica del oleaje diferente a la actual, por lo que es necesario tener un conocimiento previo de esta, tanto en la situación actual como futura, al objeto de proyectar las actuaciones necesarias para mantener la estabilidad de las playas y adaptarlas a la nueva configuración de la cala».

Por todo ello el contrato contempla el estudio de la dinámica litoral y la redacción del proyecto para la retirada de escolleras y diques para una estabilización de la playa afectada y la eliminación de barreras artificiales que puedan estar afectando a esta.

Aunque el presupuesto base de licitación era de 47.054,49 euros, la adjudicación final es por solo 19.452,81 euros a la empresa Acadar, ya que en el proceso ha primado la oferta más ventajosa para los intereses de la administración, de entre las 22 propuestas recibidas.

La construcción del dique y paseo fue autorizado por orden ministerial en 1968, y una década después se dio permiso para su reforma y ampliación con un dique y contradique para formar una dársena para embarcaciones de recreo, pero con el fallecimiento del titular de la concesión no se concluyó, dándose por extinta la concesión en 1991 y siendo revertidos los terrenos al Estado en 1993.

Por su parte la edil de Playas, Cynthia Alavés (Compromís), explicó que desde que accedieron al gobierno municipal en 2015 vienen reclamando esta obra, dado el peligro que representa esta estructura para por ejemplo bañistas pese a estar vallada, además de que su eliminación permitirá mejorar la calidad de las aguas de la cala.