Los regantes empiezan a ver la luz al final del túnel, o más bien el agua. La Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Local ha sacado a licitación por casi 2,6 millones de euros la obra que permitirá aprovechar el agua que la depuradora de Sant Joan vierte al río Seco desde hace siete años.

El Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) publicó el pasado 8 de marzo el anuncio del concurso para la obra hidráulica de estación de bombeo e impulsión, para elevar el agua depurada desde la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de l'Alacantí Nord hasta los depósitos de El Pantanet en Mutxamel.

El coste de la actuación se cifra en 2.578.191,59 euros, con un plazo de ejecución de 24 meses. Según informaron fuentes de la Generalitat, la previsión es que se inicien los trabajos a finales de año si se cumplen los plazos, pese a que en un principio se confiaba que el proceso hubiera sido más rápido y que las obras ya estuvieran en marcha. El retraso en la tramitación hace que el agua no llegue a los regantes, en el mejor de los casos, hasta finales de 2020 o principios de 2021, es decir prácticamente una década después de que se pusiera en marcha la depuradora, que tira al río más de 5 millones de litros diarios, es decir unos 2 hectómetros cúbicos al año de agua regenerada que acaba en el mar, y que puede llegar hasta los 4 hectómetros cúbicos, ya que funciona a mitad de su máxima capacidad de tratamiento.

Pero lo cierto es que esta demora ha tenido daños colaterales muy positivos. El caudal ha creado un auténtico corredor verde entre Sant Joan y la desembocadura en El Campello, un vergel que ha atraído a 47 especies de aves y que ha cambiado por completo la desértica imagen que ofrecía hasta 2011, y donde está previsto mantener un caudal ecológico. Desde el Consistorio campellero van a insistir en que por el río siga corriendo agua suficiente para que el humedal se conserve.

Las obras proyectadas consisten en una estación de bombeo en la depuradora, un sistema de dosificación hipoclorito y una conducción de 450 milímetros de fundición dúctil y de 3,3 kilómetros desde la depuradora hasta los depósitos de el Pantanet, siguiendo el curso del río Seco. Desde la Comunidad de Regantes Sindicato de Riegos Huerta de Alicante su presidente, Francisco Vidal, mostró su satisfacción por que esta lucha que llevan librando desde la puesta en marcha de la depuradora en 2011 esté más cerca de dar sus frutos, y confía en el que los plazos se puedan acortar para disponer de nuevos recursos hídricos para l'Alacantí. Tal y como viene informando este medio, la Generalitat puso en marcha la estación de Sant Joan en 2011 con una inversión de 33 millones de euros, tras eliminar del proyecto por falta de fondos la infraestructura para que los regantes pudieran aprovechar el agua.