El sistema de compra de casas por parte del Ayuntamiento para destinarlo a viviendas sociales ha sido menos fructuoso de lo esperado. Si al primer concurso no se presentó ninguna oferta, al segundo optaron cuatro, y una de ellas se retiró porque el propietario la vendió antes. Ayer, la Mesa de Contratación decidió rechazar dos de las tres casas presentadas porque no se ajustan al pliego de condiciones. Era necesario realizar arreglos para hacerlas habitables y ese aspecto no está contemplado por el pliego de condiciones, el segundo que se hizo para hacer más fácil que algún particular o inmobiliaria se presentase al concurso. Y un informe jurídico rechazaba esa compra.

Ayer se celebraba la apertura de las plicas económicas y el Ayuntamiento ha decidido seguir adelante con la compra de la única vivienda que se encuentra en buenas condiciones, un inmueble ubicado en la calle Alcoy por el que el propietario ha solicitado 75.400 euros, el tope máximo era de 80.000 euros sin IVA. Dicha vivienda está ocupada actualmente por estudiantes.

Los tres grupos del Gobierno municipal de San Vicente (PSOE, Guanyar y Compromís) acordaron seguir con el proceso de compra pública de viviendas para destinarlas a uso social. Y van a estudiar la viabilidad de que una parte del dinero inicialmente previsto para ello se destine a alquilar casas con ese mismo fin.

El Ayuntamiento va a elaborar nuevos pliegos de condiciones para seguir con el proceso de compra de inmuebles, pero, para atender la necesidad urgente de viviendas sociales, estudia abrir el abanico y optar también por alquiler municipal, para recibir una mayor demanda de inmuebles. Y desde el tripartito anuncian que ambos procesos, compra y alquiler, no son excluyentes y pueden desarrollarse de forma paralela.

El portavoz socialista y concejal de Contratación, José Luis Lorenzo advierte que se debe optar por aumentar la calidad y accesibilidad de los inmuebles que compre por el Ayuntamiento en los nuevos pliegos. Sobre todo porque la vivienda que se adquiere no es accesible al carece de ascensor. Y recuerda que los socialistas siempre han apostado por el alquiler.

Para la portavoz de Guanyar y concejal de Urbanismo, Mariló Jordá, «existe una urgencia de vivienda social y el abanico de opciones puede ampliarse si el Ayuntamiento alquila inmuebles y los arrenda a precios sociales para los más necesitados».

Y añade que de los más de 500.000 euros que restan de la partida tras la compra de una vivienda para este fin, una parte podría dedicarse a alquiler.

Por su parte, la concejala de Bienestar Social, de Compromís, Begoña Monllor, considera que «la opción del alquiler puede ser una solución compatible y complementaria para que el Ayuntamiento resuelva el grave problema de vivienda social que hay en San Vicente».