El cuatripartito de El Campello ha aprobado la salida a concurso de la gestión de la piscina cubierta y de las pistas deportivas anexas, unas instalaciones que costaron más de cinco millones de euros y que, pese a haber finalizado su construcción hace más de un año, permanecen cerradas.

El equipo de gobierno formado por Compromís, PSOE, Partido del Campello y el edil no adscrito David Alavés, pese a estar en minoría, ha conseguido sacar adelante el inicio de la adjudicación del complejo deportivo gracias al apoyo del Partido Popular y de Ciudadanos.

En el pleno celebrado ayer, el concejal de Deportes de El Campello, Pere Lluis Gomis, agradeció «la implicación del grupo popular en el debate de la documentación y también sus aportaciones». «Tenemos la instalación más moderna de la provincia y la más eficiente y estos documentos [el pliego] garantizan que el servicio que se preste será de los más altos del entorno y también de seguridad para el Ayuntamiento», añadió el edil.

La concesión será por 12 años prorrogable a otros 3 y requerirá de una inversión de 600.000 euros en equipamiento del complejo, además de otras obligaciones que contempla el pliego de condiciones. Sin embargo, el Ayuntamiento de El Campello se reservará un número determinado de plazas para el baño, una pista de pádel y unas horas de uso semanales de las pistas polideportivas.

Por otra parte, el pliego de condiciones, un documento de más de 300 páginas, también contempla una serie de criterios voluntarios que se valorarán positivamente en aquellas empresas que se presenten al concurso y que estén dispuestas a llevarlos a término. Entre ellos se encuentra la ampliación del horario mínimo, la compra de material adicional y la construcción de una zona de aparcamiento junto al complejo deportivo.

Pere Lluis Gomis explicó que la piscina cubierta y las pistas anexas no comenzarán a funcionar hasta el inicio del próximo curso escolar aproximadamente ya que, tras la aprobación del pliego de contratación, se abrirá un plazo de unos dos meses para que las empresas interesadas en la explotación del recinto deportivo puedan presentar sus ofertas. Además, tras la adjudicación, los gestores cuentan con un máximo de seis meses para poner en funcionamiento el servicio. Mientras tanto, el Consistorio continuará abonando los 5.900 euros mensuales que cuesta el mantenimiento de las instalaciones.

Por su parte, el grupo municipal de Esquerra Unida fue el único que no apoyó la propuesta, ya que reclaman que la gestión del complejo sea municipal.