La Policía Local de San Vicente del Raspeig ha descubierto tres edificaciones en una zona de especial protección en el Sabinar. Se trata de dos casas de madera y de una caravana que están dentro de un terreno de algo más de 2.000 metros cuadrados cada una, cuando para el suelo no urbanizable de protección ecológica se exigen 25.000 metros cuadrados. La concejala de Urbanismo, Mariló Jordá, ha abierto tres expedientes para exigir a los propietarios que restauren la legalidad urbanística y los expedientes para su aprobación se llevan a la junta de gobierno. Jordá, a su vez, los va a trasladar al Ministerio Fiscal «para determinar la existencia de posibles delitos contra la ordenación del territorio y también a la conselleria competente en materia de agricultura y medio ambiente».

Especial Protección de Aves

Las parcelas se encuentran incluidas en el ámbito protegido Natura 2000, en la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Riu Montnegre.

La concejala declaraba que el Ayuntamiento «vela por el cumplimiento de las normas urbanísticas y ya tiene ultimados los expedientes contra estas edificaciones que de forma ilegal se han levantado en una zona especialmente protegida como el Sabinar». Los responsables de las edificaciones tienen un mes para presentar alegaciones.

Con placas solares

Las resoluciones parten de las actas de inspección urbanística de la Policía Local. En una de ellas se ha documentado la instalación de una edificación de madera, con un uso previsible de vivienda, ya que dispone de instalación de placas solares y calentador de agua y de una balsa desmontable. En otra se denuncia la construcción de un vallado con bases prefabricadas de hormigón y la instalación de una caravana y un depósito de agua. Y la tercera resolución se ha dictado por un vallado de malla metálica y postes metálicos, edificación de madera ejecutada para uso de vivienda, instalación de madera como almacén, instalación de caravana, depósito de agua, balsa y ejecución de escalera de madera.

A la vez, los agentes también han descubierto un movimiento de tierras en una zona acotada para el vuelo de drones y ha enviado un expediente a la Conselleria de Medio Ambiente al encontrarse en la zona de especial protección para las aves para que determine si esta actividad es legal. «Hemos enviado el informe porque aunque no hay ninguna construcción como en el caso anterior, hay una actividad, y es algo que regula la Generalitat y creemos que puede ser incompatible». El Ayuntamiento también le ha dado un trámite de audiencia a la asociación.