La paciencia del Partido Socialista de San Vicente del Raspeig ha llegado a un punto de no retorno. Más de dos meses después de que Manuel Martínez dejase su acta de concejal, ésta sigue esperando en las oficinas del Ayuntamiento a ser recogida por la siguiente edil en la lista de los socialistas, es decir, por Sonia Sánchez Lumbreras. Pero nada se sabe de Sánchez Lumbreras, quien hace dos semanas aseguró haber recibido presiones por parte del alcalde, Jesús Villar, y del portavoz del grupo socialista, José Luis Lorenzo, para asumir la concejalía de Personal, además de las que Martínez había abandonado (Presidencia, Radio Municipal, Informática y Participación Ciudadana).
Sánchez Lumbreras, que declinó dicha oferta alegando que su trabajo le impedía asumir cinco concejalías, aseguró que su intención era la de recoger el acta para ocupar su cargo como edil del Partido Socialista. Dos semanas después, el certificado sigue sin ser recogido y el PSOE ya se ha cansado de esperar.
Hartos de la indecisión de la número seis en la lista del Partido Socialista, el portavoz del grupo municipal, José Luis Lorenzo, le dio como plazo a Sánchez Lumbreras hasta el pleno que se celebró ayer para aceptar la oferta del alcalde de San Vicente. Pero las oficinas municipales cerraron a las 15.00 horas y la interesada no apareció. Además, fuentes municipales aseguran que no se ha mantenido contacto alguno durante esta semana con la que ya es conocida como «concejal a la fuga».
Por todo esto, el Partido Socialista de San Vicente Raspeig ha decidido iniciar un expediente de expulsión del partido contra Sonia Sánchez Lumbreras que, si bien es militante de la formación local, lleva desvinculada de la ejecutiva desde hace casi tres años.
Para el portavoz del grupo municipal socialista, Sánchez Lumbreras «está utilizando su acta como moneda de cambio y para provocar un desgaste interno en el partido». «Se ha declarado en rebeldía, no teníamos ningún frente abierto con ella, así que esto debe de formar parte de una estrategia interna», añade José Luis Lorenzo. Asimismo, el concejal del PSOE confirma que «el partido ya no cuenta con Sonia» y argumenta que «el desplante hacia el alcalde de tu propio partido es un motivo suficiente de expulsión».
Y es que, en el caso de que finalmente Sánchez Lumbreras decida recoger su acta de concejal, el Partido Socialista la expulsaría del grupo municipal y ésta pasaría a formar parte del bando de los no adscritos, convirtiéndose en la tercera edil tránsfuga de San Vicente. Pero de momento el pleno de la localidad cuenta con un concejal menos.
¿Qué dice la ley?
La legislación no establece un plazo máximo para que una persona acepte o decline un acta de concejal, por lo que Sánchez Lumbreras podría alargar esta situación hasta mediados de 2019, es decir, hasta las próximas elecciones municipales.
Concejalías en el aire
Todavía están en el aire las cinco concejalías que dirigía Manuel Martínez y es muy probable que el alcalde proceda hoy a reestructurar las áreas entre los 11 ediles del equipo de gobierno. Y todo apunta a que será el socialista José Luis Lorenzo el que asuma Recursos Humanos.
