Los Reyes Magos tampoco quisieron perderse su cita anual con los niños de la comarca de l'Alacantí, que recibieron con alegría e ilusión a Sus Majestades bajo una lluvia de caramelos y regalos. Melchor, Gaspar y Baltasar llegaron por mar al municipio de El Campello y desembarcaron en el Club Náutico para recorrer la avenida Carrer La Mar y las principales calles de la localidad en carroza, en un desfile en el que no faltaron el baile y la música tradicional de las dolçainas y los tabalets.

A San Vicente del Raspeig, los Reyes Magos prefirieron llegar en un carro tirado por caballos a la plaza Víctimas del Terrorismo, donde saludaron a los más pequeños. La cabalgata, que arrancó a las 19.00 horas tras el disparo de un castillo de fuegos, contó con un total de 15 carrozas, nueve ballets y seis bandas de música y con la participación de las representantes de las fiestas del municipio y de asociaciones locales.

El baile y la música también estuvieron muy presentes en la cabalgata que se celebró en Sant Joan d'Alacant. Un grupo de majorettes fue el encargado de abrir el desfile, que partió desde la plaza de la Constitución y que finalizó en la plaza de España, desde donde los Reyes Magos se dirigieron a la iglesia parroquial para celebrar la tradicional adoración al niño Jesús.

Melchor, Gaspar y Baltasar también recorrieron las calles de Xixona bajo la atenta mirada de los niños que cada año esperan con gran ilusión este mágico día. Y en Mutxamel, donde reciben la visita de Sus Majestades desde los años 50, los Reyes saludaron a los asistentes desde una carroza artesanal elaborada por los organizadores del desfile. Asimismo, les acompañó un amplio boato con plumeros, antorchas y cofres y un caballo con un jinete que portaba la estrella que les guía.