La cena de empresa acabó mal para un hombre de 36 años que ayer tuvo que ser rescatado por los bomberos del Parque de San Vicente del Raspeig cuando su brazo quedó incrustado , en la valla que intentó saltar.

Sobre las siete y media de la mañana, el accidentado volvía de la celebración de la cena de empresa junto a su novia cuando descubrió que no tenía las llaves de su casa, una vivienda unifamiliar ubicada en la avenida del Vincle, en El Campello, por lo que trató de saltar el cercado.

Al hacerlo, incrustó su brazo en la punta del vallado, «con la suerte», según reconocían los bomberos que acudieron a atenderle, de que al ser un hombre de complexión fuerte y sobre todo alto, no sufrió el desgarro de la extremidad al poder llegar con los pies al suelo cuando dio el salto.

Con un trozo al hospital

Los bomberos de la Diputación actuaron rápidamente y, junto a efectivos de la Policía Local de El Campello y también de facultativos del Hospital de San Juan, serraron parte de la verja en la que estaba atrapado y ensartado y decidieron trasladar al herido con el trozo de valla para retirarla posteriormente y con sumo cuidado en el centro hospitalario.

Fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos explicaron que el hombre se mantuvo consciente en todo momento y con gran entereza, señalando a la vez que a, pesar de la mala suerte de la caída, el accidentado tuvo a su vez la fortuna de que la herida afectó sobre todo al músculo del brazo pero no tocó la arteria, que podría haber sido más complicado.

La intervención de los bomberos del parque de San Vicente del Raspeig se inició sobre las siete y media y finalizó casi dos horas después.

Otro caso similar: Liberan en Dénia a un hombre con la cabeza atrapada entre un inodoro y la pared

Los bomberos pudieron liberar al hombre, que llevaba una hora atrapado, tras desatornillar el váter

Los bomberos del parque de Dénia realizaron el pasado 25 de octubre un servicio insólito. Recibieron un aviso de la central de que un hombre estaba atrapado en el aseo de un negocio de recreativos de la calle Marqués de Campo de Dénia. Se desplazaron a toda prisa. Al llegar hallaron al hombre, de unos 50 años, con la cabeza aprisionada entre el váter y la pared.