Las conductas agresivas y violentas de estudiantes a sus profesores se han multiplicado. Así lo advierte la concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig en su Memoria del Observatorio Municipal de Violencia Social 2016-2017 que se lleva a aprobación en el pleno del 20 de diciembre. Dicha memoria advierte de un incremento de las actitudes violentas en el ámbito de los institutos así como de las intervenciones en los centros educativos tanto para paliar como para prevenir conductas que se presumen podrían ir a más, que suman 286.

El Programa de Mediación de Conflictos en Centros de Secundaria señala un aumento de situaciones conflictivas superior al de otros años, tanto entre los propios compañeros como a nivel familiar y con el profesorado, que se ha incrementado en un 15%, según indican fuentes de la Concejalía. Los expertos también han detectado que se está generalizando el fenómeno de las agresiones verbales a los profesores utilizando las nuevas tecnologías. «Ello nos lleva a pensar que las llamadas figuras de autoridad atraviesan una importante crisis muy sintomática como efecto de la repetición de modelos familiares donde el niño no tuvo suficiente escucha, reconocimiento ni fue suficientemente limitado en sus impulsos», destacan los expertos en el informe. La edil de Bienestar Social, Begoña Monllor, recalca el aumento significativo del uso de las redes para insultar a los docentes y recalca el esfuerzo que se realiza para concienciar a los alumnos contra dichas conductas.

En total en los cinco institutos se han producido 52 conflictos entre alumno y profesor. Casi se duplican en el caso de aquellos en los que los implicados son estudiantes, un total de 96.

Bienestar Social ha realizado 39 intervenciones para solucionar conflictos entre alumnos y profesores y 90 entre estudiantes.

Otros de los conflictos familiares que más preocupan a la concejalía es el que afecta al estudiante en su entorno familiar con 114 situaciones problemáticas. Para ello se han realizado 146 entrevistas con las familias y en 14 casos se ha realizado una mediación.

El área que dirige Monllor también ha detectado dos casos de trastornos alimentarios en estudiantes de dos institutos.