El pleno de El Campello rechazó el jueves por la noche la propuesta del PP para agilizar el convenio para el nuevo cuartel de la Guardia Civil, que incluía que el Ayuntamiento pagara la construcción de las dependencias. El cuatripartito formado por Compromís, PSOE, Partido del Campello y el concejal no adscrito David Alavés (9 ediles), gracias al respaldo de Esquerra Unida (2), tumbó la moción de los populares (7), que fue apoyada por Ciudadanos (3).

Pese a que el alcalde Benjamí Soler (Compromís) ya mostró su postura contraria a financiar el acuartelamiento y así se lo había trasladado al Ministerio del Interior, manifestó el pasado lunes que dejaba la decisión final en manos del pleno, donde tenía que debatirse la moción del PP y carece de mayoría. Pero gracias al respaldo de EU, el cuatripartito ha logrado mantener su criterio e insistir al Ministerio en una cesión de la parcela municipal donde se proyecta el cuartel, a cambio de recuperar el solar donde se ubican las antiguas instalaciones, junto a la Torre de la Illeta dels Banyets, donde el Ayuntamiento planea junto con el MARQ una gran área cultural.

EU justificó su respaldo en que ha tenido conocimiento esta semana de que el Ministerio, tras responder la Corporación hace unos meses que no puede asumir el coste del cuartel, no rechazó entonces seguir adelante con el convenio, sino que emplazó a continuar con la tramitación para culminar la cesión de la parcela municipal, por lo que «no es cierto que no se vaya a construir si no lo paga El Campello», aseveró EU.

Todos los grupos manifestaron la importancia de que la Guardia Civil mantenga su cuartel en este municipio turístico por motivos de seguridad, aunque desde el equipo de gobierno se recuerda que con los 1,5 millones de euros el Consistorio puede realizar inversiones muy necesarias en el municipio, y que ya advirtieron al Ministerio que ante la anulación en abril de 2016 del PGOU y la llegada de reclamaciones de responsabilidad patrimonial millonarias de afectados, El Campello no se puede comprometer a ese gasto al no saber cómo van a acabar las denuncias. Y todo pese a que la Corporación acumula en el banco más de 30 millones de euros y carece de deudas.

El PP insistió en que la forma de asegurar la permanencia de la Guardia Civil es sufragando la construcción, recordando que el propio alcalde había dejado entrever la posibilidad de que la Benemérita se pudiera marchar a Mutxamel, y lamentando que en dos años y medio no se haya avanzado en el convenio. La moción también instaba a agilizar la tramitación del convenio.

La nueva parcela se ubica en la zona entre la calle San Ramón y la avenida Ausias March, y sobre ella el Consistorio ha realizando una modificación de planeamiento urbanístico para adaptar su uso al nuevo cuartel. Pese a que hace un año tanto el Ministerio de Interior como el Ayuntamiento manifestaron durante la visita del delegado del Gobierno Juan Carlos Moragues a las dependencias provisionales, junto a la desembocadura del río Seco, que la firma del convenio era inminente, y que la Corporación asumiría el coste de la obra, finalmente tendrá que ser el Gobierno quien sufrague la construcción. Y mientras, la Benemérita está pagando un alquiler por el inmueble que ocupa desde el 1 de julio de 2016 de forma transitoria, hasta que tenga nuevo cuartel.