Una decena de parques y jardines de San Vicente del Raspeig van a mejorar sus espacios de sombra. Todo con el objetivo de que en las épocas de mayor calor, cuando el sol es más intenso, también puedan ser utilizados tanto por los niños que disfrutan de los juegos infantiles como de quienes descansan en los bancos. La Concejalía de Medio Ambiente está acometiendo un proyecto con soluciones adaptadas a cada espacio para dotarlas de más sombra. Para ello, el Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig invierte un total de 50.000 euros en un proyecto que estará finalizado antes de que acabe el año.

La actuación responde a una necesidad expresada por los vecinos en el proceso participativo de los presupuestos vecinales, que pidieron más sombra en estos espacios.

Los puntos donde se van a realizar las intervenciones personalizadas son la avenida Primero de Mayo, la plaza del Maestro, la plaza de Pepita Moltó Peral, la plaza Víctimas del Terrorismo, la plaça Horts dels Lleons, la calle Pelayo, la plaça de Les Flors, la plaça de la Democràcia, la avenida 3 de abril 1979, una plaza interior, la avenida Girasoles y la carretera de Castalla por calle Teuladí, según indican desde la Concejalía de Medio Ambiente.

Para justificar esta intervención, los técnicos reconocen que la climatología de esta zona, con temperaturas altas durante la primavera y particularmente en verano, hace difícil utilizar plazas y parques durante gran parte del día si no existe suficiente sombra.

Merenderos y juegos de niños

«En particular, la necesidad de protección se hace más acuciante en zonas de bancos y merenderos y en las áreas de juegos infantiles, donde los niños pueden sufrir daños por exceso de exposición al sol o sufrir quemaduras por el roce con algún material metálico», indican.

Los espacios donde se va a actuar tienen escasez de sombra, bien por diseño original en el que no se tuvo en cuenta que sería necesario contar con más sombra, por escaso desarrollo de los árboles existentes o bien por limitaciones técnicas o económicas cuando se ejecutaron.

La concejala de Medio Ambiente, Nuria Pascual, explica que para crear las zonas de sombra se ha optado por el arbolado «ya que además de proporcionar sombra, refrescan, oxigenan y depuran el aire, actúan como filtro contra el ruido e incrementan la biodiversidad al ser refugio de animales», indica.

Ficus, tipuana, melia

La mayor parte del nuevo arbolado será morera, ficus, tipuana y melia. En algunos casos se ha previsto el transplante de árboles e incluso la tala en aquellos en mal estado, en otros el alcorque se hará más grande para permitir que el árbol se haga más grande.

«Además, con los árboles se produce una mejora estética y paisajística de los espacios y un menor coste de establecimiento que el de elementos artificiales. Para que el arbolado tenga las suficientes garantías de pervivencia y crecimiento, el proyecto incluye las instalaciones de riego», añade.