El Ayuntamiento de Mutxamel se ha propuesto que los particulares que cuenten con solares sin urbanizar en el municipio los mantengan limpios y acondicionados. Así, ya son más de 200 requerimientos los que la Concejalía de Urbanismo ha remitido a los propietarios de parcelas para que acometan los trabajos de limpieza necesarios para reducir el riesgo de incendios que pueden surgir por la acumulación de maleza y por las altas temperaturas que se están registrando en la provincia y para evitar la aparición de ratas y plagas de insectos.

«No podemos tener parcelas en el municipio que ardan porque alguien tire una colilla o porque caiga un rayo», manifestó Jose Antonio Bermejo, edil de Urbanismo de Mutxamel. «Yo personalmente me lo he tomado como un tema primordial», añadió el concejal del Partido Popular.

Así, ya son más de 200 las órdenes de limpieza emitidas por el Ayuntamiento, una cifra que crece día tras día debido a las reclamaciones de los vecinos que viven cerca de un solar sin acondicionar, a los informes emitidos por la Policía Local y a los casos que recopilan los técnicos del Ayuntamiento. «Al día estoy firmando cinco o seis requerimientos», aseguró Jose Antonio Bermejo.

El grueso de los solares privados que necesitan tareas de limpieza y desbroce se concentra en las urbanizaciones, como por ejemplo en Río Park, donde el presidente de la asociación de vecinos, Jose Molina, denuncia que hay un gran número de parcelas que necesitan ser acondicionadas de manera urgente por la cantidad y la altura de la maleza seca.

El concejal de Urbanismo explicó que el 85% de los requerimientos se solucionan sin necesidad de abrir un expediente sancionador a los propietarios. Y es que, tras la emisión de la orden, los particulares cuentan con 20 días para acometer las tareas de limpieza.

Por el contrario, al 15% restante que se le abre un expediente, suele corresponder a solares propiedad de bancos, a terrenos embargados o cuyos propietarios se encuentran inmersos en un litigio judicial. «La multa va en proporción al tamaño de la parcela y de lo que valdría la limpieza. Se hace una valoración del coste y se divide en diez partes, que son cada una de las multas que se pueden aplicar. Si el Ayuntamiento tuviese que limpiarlas lo haría utilizando ese dinero», explicó el edil popular.