Los Moros y Cristianos cerraron ayer sus festejos con una jornada eminentemente religiosa en la que se rindió homenaje al patrón de Agost, Sant Pere Apòstol. Los festeros realizaron al filo del mediodía una Ofrenda de Flores al patrón, en la que también aportaron alimentos para los más necesitados, y a la que siguió la Misa y un pasacalles. Y ya por la tarde llegó la Procesión que puso el colofón a los días grandes de los Moros y Cristianos de Agost.