El expresidente de la Junta Festera del Campello, Antonio Ramos Baeza, falleció ayer a los 63 años de edad. Su sepelio, celebrado esta tarde en la iglesia de Santa Teresa, ha significado una sentida y masiva despedida al popular "fester", que transitó por todos los peldaños del escalafón festero, desde integrante de comparsa a máximo dirigente de las fiestas mayores, pasando por "ambaixador", además de presentador del Llibret y pregonero de las fiestas de Moros i Cristians de su querido pueblo natal.
La inesperada e impactante desgracia congregó a multitud de conciudadanos, entre ellos el alcalde, Benjamí Soler, y varios concejales; Ángela Sanz, presidenta actual de la Junta; vocales y cargos festeros en activo y anteriores; así como personas venidas de pueblos limítrofes, que abarrotaron el templo parroquial y sus inmediaciones, consternados por la infausta desgracia, pues el finado gozaba de justa y merecida popularidad, además de por sus innumerables virtudes personales, por su participación en todos los actos festivos desde sus inicios en los años sesenta.
Antonio "el Nap", como se le conocía popularmente, tenía 63 años y falleció de manera inesperada el domingo en El Campello, a consecuencia de un paro cardíaco, y sus restos mortales, al llegar a la Plaça Canalejas, fueron recibidos con un castillo de fuegos artificiales, en honor a quien con su aportación individual colaboró durante medio siglo para que las fiestas, a las que tanto estimó, llegasen a tener el prestigio de que ahora gozan. Descanse en paz.
