Primer pleno del equipo de gobierno de San Vicente en minoría como tripartito, tras la expulsión de Sí Se Puede. PSOE, Compromís y Guanyar sacaron ayer adelante la prórroga del servicio del autobús urbano pese a su recién estrenada minoría, gracias al respaldo de su exsocio de gobierno y la abstención del resto de la Corporación.

En esta sesión se escenificó la ruptura del cuatripartito, dándose cuenta de las revocación de las delegaciones de los dos ediles de Sí Se Puede y de la redistribución de concejalías, y el consecuente baile de sillas, pasando Sí Se Puede a la bancada de la oposición y arremetiendo el portavoz de este partido, David Navarro, contra el alcalde Jesús Villar por su expulsión del ejecutivo.

El punto más delicado de este pleno, que arrancó dos horas antes de lo habitual, a las 17.00 horas, por las celebraciones que aún quedan esta semana de las fiestas patronales, era el de prorrogar el contrato del servicio de transporte público urbano, aunque no hubo sorpresas. Este servicio vencía el próximo domingo y contaba con un reparo del área de Intervención, que alertaba de que esta prórroga «excedería de la duración prevista en el pliego de cláusulas jurídico-administrativas».

Pese a esta situación, el equipo de gobierno logró sacar adelante la medida, recordando el PSOE que la ley permite llevar a cabo esta prórroga extraordinaria, y que se trata de un servicio «de obligada prestación» cuya interrupción causaría «daños muy graves» a los usuarios, según los técnicos municipales, por lo que la oposición permitió su aprobación, con el apoyo de Sí Se Puede (14 votos el total) y la abstención del resto (11 votos). Un voto en contra de toda la oposición, ahora en mayoría, era una opción muy remota, ya que hubiera significado la suspensión del servicio a partir del lunes. Eso sí, el PP responsabilizó al equipo de gobierno de esta situación, producto de la «falta de previsión» del Ayuntamiento y también como «consecuencia de las disputas internas» del ejecutivo que dirige el socialista Jesús Villar.

Esta prórroga extraordinaria amplía el contrato seis meses, hasta el 31 de octubre, después de que ya se hubieran realizado dos prórrogas anuales y que aún haya un nuevo pliego elaborado para volver a sacar a concurso la contrata.

El pleno municipal, tras la expulsión de Sí Se Puede, ha quedado configurado con un equipo de gobierno formado por PSOE (5 ediles), Guanyar (4) y Compromís (3), que suman 12 (la mayoría está fijada en 13 de 25 ediles). En la bancada de la oposición el PP (7), Ciudadanos(2), Sí Se Puede (2) y los dos concejales no adscritos expulsados de estas dos últimas formaciones.

Por otra parte el pleno aprobó el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) que finalmente prevé que una futura ampliación del TRAM se haga por Ancha de Castelar y sin catenarias, con los votos favorables de toda la Corporación. El documento final ha incluido las alegaciones de PSOE y PP, que pedían que la infraestructura discurriera por la principal arteria del municipio. El portavoz del PP Antonio Carbonell lamentó que «se haya perdido un año y medio para llegar finalmente a un documento prácticamente idéntico al elaborado por los técnicos municipales durante la anterior legislatura».

Rehabilitación de edificios

Igualmente se aprobó la firma de un convenio con la Generalitat para el fomento de la rehabilitación de edificios, con los votos del equipo de gobierno, Sí Se Puede, Cs y los dos ediles no adscritos, y la abstención del PP.