El Campello

Renuncia al acta o retirada de las delegaciones. La oposición en El Campello pidió ayer contundencia al alcalde Benjamí Soler (Compromís) tras dictaminar el secretario municipal la condición de tránsfuga del tercer teniente de alcalde, David Alavés, tras su expulsión hace cuatro meses de Los Verdes-Ecopacifistas-Demòcrates.

El regidor pasará la próxima semana a ser concejal no adscrito, y pese a que el primer edil ha anunciado que no va a retirarle sus competencias en Tercera Edad, Ocupación, Cementerio y Mercado, la oposición exige su salida.

El portavoz del PP, Juanjo Berenguer, reclamó ayer «consecuencias políticas. No concibo un equipo de gobierno en el que esté un tránsfuga. Sólo por este hecho, no estaríamos en condiciones de apoyar los presupuestos ni otra medida que pudiera salir de un gobierno así. Si Alavés no deja el acta, algo que tendría que hacer si tuviera un mínimo de talante democrático, el alcalde tiene que quitarle las competencias. El Bloc -actualmente dentro de Compromís-, que siempre ha alardeado tanto en el tema de los tránsfugas con Vicente Rubio, debería actuar el consecuencia».

Por su parte el portavoz de Cs, Julio Oca, señaló que «no nos parece coherente que el equipo de gobierno se apoye en un tránsfuga. Está claro que Alavés bordeó la Ley para presentarse a las elecciones con Los Verdes, sin ellos no habría podido, por lo que debería irse. Y si no, el alcalde debe quitarle las delegaciones. Parece que todo vale para mantener el sillón y el sueldo».

El edil de EU Pedro Mario Pardo señaló que «preferimos no adelantar acontecimientos y esperar a leer los informes y tener toda la información antes de juzgar el caso. Pero adelantamos que de confirmarse exigiremos acciones contundentes. Lo denunciamos cuando estuvimos en el gobierno y lo haremos también en la oposición», su rechazo frontal a la presencia de tránsfugas.