La Guardia Civil de San Vicente del Raspeig ha detenido a un español de 36 años como el autor de los diversos robos de cableado de cobre registrados en este último mes en esta localidad, los cuales llegaron a dejar a los vecinos de la partida Moralet y de las inmediaciones de la cv-820 totalmente incomunicados, sin suministro telefónico ni de Internet, según informa el instituto armado en un comunicado.

El pasado mes de enero se registró un repunte en el robo de cableado de cobre en las afueras de San Vicente del Raspeig, más concretamente en la carretera cv-820 (San Vicente-Agost) y en la partida alicantina del Moralet.

Estos robos causaron un gran perjuicio a los vecinos de estas zonas residenciales quienes, a consecuencia de dichos cortes en el cableado de las diferentes instalaciones perjudicadas, sufrieron cortes durante varios días, quedando incomunicados y careciendo de los servicios esenciales como telefonía e Internet, no pudiendo ni tan siquiera comunicarse con los servicios de emergencia básicos del número 112, ni tampoco pudiendo hacer uso del servicio de tele asistencia las personas de avanzada edad y similares.

El total del cableado de cobre robado asciende a unos 1.200 metros, siendo su valor económico de 20.000 euros, entre el material sustraído y los daños producidos a consecuencia de ello, según las mismas fuentes.

Rápidamente, los agentes de la Guardia Civil de San Vicente iniciaron una investigación para tratar de identificar y localizar al autor o autores de estas sustracciones y solo unos días después, y tras una incesante investigación, se detuvo al autor de estos hechos, que cuenta con numerosos antecedentes por delitos similares.

El detenido se encontraba ocupando ilegalmente una vivienda de la Partida El Moralet, lugar en el que almacenaba todo el material sustraído y donde quemaba el cobre para separarlo del aislante de goma que lo cubre.

Tras efectuar una entrada y registro, en presencia de su abogada proporcionada de oficio, en esta vivienda donde residía ilegalmente, se encontró una gran cantidad de cableado de cobre, así como las cubiertas de goma con las inscripciones de "MoviStar" y "Telefónica", a las cuales les extraía los hilos de cobre que, una vez quemado, tendría dispuesto para su venta a las chatarrerías y negocios de recuperación de materiales de este tipo.

También se ha intervenido multitud de herramientas de corte de grandes dimensiones (cizallas telescópicas, tijeras, mazas, guantes), las cuales utilizaba para cometer los diferentes delitos. Los investigadores también han conseguido averiguar la chatarrería donde el detenido vendía el material sustraído, encontrándose en esta misma localidad.

Por todo esto, al detenido se le imputa un delito continuado de robo con fuerza en las cosas (por un total de once hechos diferentes registrados) y un delito contra la seguridad colectiva, por los desórdenes públicos causados a raíz de sus robos. Una vez puesto a disposición judicial, quedó en libertad provisional con cargos.