La Concejalía de Educación de Mutxamel proyecta implantar un programa de material socializado en los cinco centros educativos de titularidad pública del término municipal. En concreto, el objetivo del Ayuntamiento es conseguir reducir el dinero que las familias deben aportar cada año para la compra de los materiales del aula.

La idea del edil de Educación, Rafael García, es destinar la actual partida presupuestaria dirigida a conceder las becas de material escolar para llevar a cabo este proyecto. Así, las familias mutxameleras que cada año se benefician de dichas ayudas, dejarán de percibirlas, ya que serán los colegios e institutos los encargados de gestionar el dinero para comprar los materiales que cada nivel educativo necesite para llevar a cabo actividades didácticas.

García explicó que se pretende dividir la cantidad destinada a las becas -más de 40.000 euros- entre los centros, de tal forma que todos los alumnos se beneficien y no solo los que en la actualidad consiguen acceder a la ayuda municipal, que se concede según los tramos de renta.

«Queremos que el dinero que pagan las familias en material se aminore y que, en un futuro, no tengan que pagar nada, porque la educación tiene que ser pública y gratuita», comentó el edil popular. «No quitamos las becas, sino todo lo contrario. Vamos a dotar al aula y en el aula están los alumnos, por lo que todos se beneficiarían», aclaró García. Y es que, al inicio de cada curso escolar, cada familia aporta entre 50 y más de 100 euros (dependiendo del centro y del nivel educativo) para la compra de materiales para el aula.

A través de esta iniciativa, el Ayuntamiento también quiere acordar una fórmula para que los centros docentes gocen de una mayor autonomía con la firma de un convenio para que sean ellos los encargados de gestionar el dinero que percibirán de las arcas municipales.

El Consistorio mutxamelero tendrá que determinar de qué forma se reparten los más de 40.000 euros que, a día de hoy, se destinan a las becas directas de material. «No sabemos si ponderar entre número de alumnos o si dividir el dinero entre los cinco centros por igual. Yo soy de la postura de que todos tengan lo mismo», manifestó el regidor del Partido Popular.

Según García, otro de los objetivos de Educación es conseguir «eliminar el problema burocrático que hay en los ayuntamientos», porque muchas personas desisten de solicitar las ayudas municipales por toda la documentación que hay que presentar y por los largos procesos que hay que seguir.

El edil de Educación mantendrá hoy una reunión con las AMPAs y los equipos directivos de los colegios e institutos de la localidad para conocer su postura en la implantación de dicho programa. Un plan que si sale adelante comenzará a funcionar en septiembre de este año. «Hemos intentado ponerlo en marcha otros años pero siempre nos pillaba el toro», manifestó Rafael García.