Sin grúa asegurada y con un coste superior al que tendría si el servicio estuviera contratado ya. Así se encuentra actualmente San Vicente del Raspeig que mantiene el servicio de retirada, inmovilización y depósito de vehículos en precario. El área de Seguridad ha tenido que llegar a un acuerdo económico con la empresa Grúas Alacant para garantizarlo pero con la salvedad de que ya no está disponible las 24 horas, sino que es el agente el que tiene que llamar y solicitar el vehículo para realizar el arrastre de un vehículo. Hasta ahora, un agente patrullaba subido en la grúa y actuaba en el caso de detectar una infracción.

Grúas Alacant ha realizado el servicio en los últimos cuatro años hasta que se caducó el contrato el pasado 26 de septiembre. Ahora, el Ayuntamiento de San Vicente tiene que pagar por cada arrastre de la grúa en un día ordinario un total de 91 euros cada vez que engancha un vehículo. Para el portavoz y concejal del grupo municipal Ciudadanos, Serafín Serrano, se trata de un hecho muy grave que San Vicente no cuente aún con el contrato de la grúa porque supone un gasto extra para las arcas municipales. El contrato suponía un desembolso de 150.000 euros anuales. Sin contrato es más caro.

El peligro ahora es que el servicio de grúa llegue a superar el importe máximo para un contrato menor, 18.000 euros, que es lo que la ley permite tener sin necesidad de licitar un contrato. El pliego de condiciones se ha presentado tres veces en el Ayuntamiento. En dos ocasiones ha contado con reparos del área de Contratación, y la última de Secretaría.

La concejal del área, Maribel Martínez, señalaba que el servicio está garantizado y que desde el 29 de septiembre el nuevo pliego está otra vez en el área de Contratación. Pero la licitación podría demorarse al menos hasta marzo o abril.

El concejal de Ciudadanos advierte de que no sólo se realiza el servicio de arrastre en los casos en los que los coches están mal aparcados, bien sea en vados o en zonas prohibidas o carriles de circulación. También se producen arrastres cuando hay accidentes, cuando se realizan actividades de poda o alguna obra que lo requiere y muy habitualmente durante las fiestas para trasladar los vehículos. En este caso el vecino no tiene que pagar por el arrastre, pero sí el Ayuntamiento. «En las fiestas se mueven decenas de vehículos que hay que reaparcar, ahora llega la Navidad y veremos si es necesario habilitar más grúas y si hay que pagar por cada coche».

Según la ordenanza que regula el precio público, los vecinos pagan por cada arrastre de la grúa 81 euros si tienen que recoger su vehículo en el depósito, y si sólo se trata del enganche porque han llegado a tiempo antes de que sea trasladado al depósito abonan 24 euros.

Este no es el único contrato que se ha caducado sin tener otro. Algo que para el grupo popular en la oposición es muy grave y un síntoma de que no hay coordinación en las áreas del Ayuntamiento. «Es una muestra más del enfrentamiento que hay en el equipo de gobierno. Cada concejal se centra en su área y la falta de coordinación en temas que son trasversales acaban afectando al ciudadano», lamenta la concejal Mercedes Torregrosa. Al menos hay cinco contratos que han caducado sin estar licitado, además de la grúa, el de mantenimiento de instalaciones eléctricas municipales, el mantenimiento de las fuentes, el de uniformidad de la policía y el de señalización horizontal. «Falta previsión y resolución», critica la concejal del PP.