Xixona se despidió ayer de los Moros y Cristianos de los Heladeros con una jornada cargada de actos entre los que destacó la excepcional Ofrenda Floral a la Virgen de la Asunción, además de las embajadas en las que ambos bandos lucharon por el control del castillo.
Una vez más esta singular Ofrenda derrochó al filo del mediodía un espectacular colorido sin parangón en este tipo de celebraciones. Y es que las especiales características de los festejos, protagonizados por personas que en agosto no pueden participar en los Moros y Cristianos de Xixona por encontrarse en plena campaña del helado, trabajando en negocios repartidos por toda España, hacen único este acto.
Las mujeres van ataviadas con los trajes típicos de las regiones donde tienen sus heladerías, lo que da al acto un amalgama de colores extraordinario. En la Ofrenda se pudieron ver trajes tradicionales de Madrid, Sevilla, Castilla-La Mancha, Extremadura, Córdoba, Málaga, Almería, Cataluña, Murcia, Zaragoza, Valencia o de la propia Alicante, incluido el de xixonenca. Tras este acto se celebró la Misa y el posterior desfile de bajada de la iglesia.
Los festejos también ofrecieron ayer batalla, con la toma del Castillo antes de la Ofrenda por parte de las huestes musulmanas, con la Embajada del Moro. Y ya por la tarde se produjo la reconquista de los cruzados con la Embajada del Cristiano, tras la que llegó el Alzamiento de Capitanes, el desfile hasta el Ayuntamiento y la Procesión en honor a la Virgen, poniendo el colofón el castillo de fuegos artificiales.
Incorporación a la Undef
Estas Festes dels Geladors se iniciaron en 1978 y hay que destacar que este año, tras una larga trayectoria y la consolidación de los festejos, que pasaron por un cambio de fechas en 2013 para evitar las inclemencias meteorológicas de febrero y tratar así de garantizar su continuidad, la Asociación Cultural y Festera de Heladeros de Xixona ha pasado a formar parte de la Undef, el máximo organismo nacional de entidades festeras, lo que supone un reconocimiento a estos Moros y Cristianos que están a punto de cumplir 40 años de vida.
