El Campello acondicionará un nuevo vial para aliviar el tráfico entre Muchavista y la antigua N-332 y la A-70, y evitar así que se congestione la zona residencial de Los Albatros, donde Sant Joan va a conectar en breve una nueva calle que podría desviar por esta urbanización campellera buena parte de la circulación. Se trata precisamente de desarrollar una pequeña parte de la vía parque proyectada desde hace 15 años en la zona por la Generalitat para resolver las deficientes conexiones entre esta zona de playa y las citadas vías de comunicación, y que sigue en un cajón a la espera de que ponga en marcha el plan urbanístico Fabraquer.
El alcalde Benjamí Soler (Compromís) explicó ayer que esta es la medida que van a impulsar para resolver el problema que se avecina. Se trata de prolongar la calle Mongomit, que parte desde la playa, se abrió hace una década para descongestionar el tráfico en la primera línea y enlaza con la avenida Fabraquer y el Camí Reial de La Vila, desde este entronque, de forma que donde está ahora el cruce semafórico se amplíe la calle por la trasera de Los Albatros hasta conectar con la nueva calle de Sant Joan.
Y mientras se tramita esta solución, que requiere de la elaboración de un proyecto, ejecución de expropiaciones y dotación presupuestaria a lo largo de 2017, y que tardará al menos un par de años en ser realidad, el Consistorio va a adoptar otras medidas provisionales para aliviar la congestión del tráfico que temen los vecinos de Los Albatros por la calle Francisco de Orellana. Este vial hasta ahora es un callejón sin salida, pero con la apertura al tráfico de la nueva calle de Sant Joan se convierte en una alternativa muy factible para los conductores.
Reurbanización
Para evitarlo, el Ayuntamiento va a aprovechar la inminente reurbanización de las calles de esta zona residencial para reordenar el tráfico, de forma que la nueva disposición de las calles y el recorrido al que obliguen los sentidos establecidos tengan un efecto «disuasorio» entre los conductores que pretendan pasar por allí para desplazarse entre Muchavista y la N-332. Este reasfaltado tiene un coste de 90.000 euros y se llevará a cabo antes de que acabe el año.
En cuando a la nueva calle de Sant Joan que prolonga el vial Tirant Lo Blanc hasta Orellana y que permite enlazar a través de otro vial con la N-332, las obras están prácticamente terminadas a falta de algún fleco. Se está finalizando una conexión de alcantarillado y queda por asfaltar un pequeño tramo, por lo que el Ayuntamiento santjoaner espera poder abrir al tráfico en breve este nuevo vial.
